El comandante Delio Gómez Ochoa junto a combatientes del Cuarto Frente, entre ellos, Isabel Rielo, Teté Puebla y Carlos Borja. |
La
Columna 32, “José Antonio
Hechavarría", del IV Frente Oriental "Simón Bolívar" fue una fuerza guerrillera muy peculiar. Vean: La definición de
columna rebelde se asociaba a un espacio geográfico bien específico que quedaba
bajo su jurisdicción. Como toda fuerza guerrillera estas agrupaciones necesitaban
el apoyo en la población para poder sobrevivir, pero la No. 32, al ser una especie de escolta
del jefe del frente y al mismo tiempo
unidad para apoyar las operaciones de las
otras columnas, no se le asignó territorio especifico y eso la convirtió
en una caso prácticamente excepcional en la guerra contra la dictadura de
Batista.
La práctica demostró que esa
fue una decisión muy acertada. Por la concentración de fuerzas enemigas y las desventajas
geográficas, lo que permitía un rápido desplazamiento del enemigo y por el objetivo fundamental del Cuarto
Frente, que era impedir las comunicaciones entre Oriente y Camagüey, se necesitaba una fuerza capaz de
reforzar rápidamente a las columnas que operaban en la zona y esa misión la
cumplió la columna 32 que se conocía además como la de los estudiantes por
estar integrada, fundamentalmente, por un grupo de ellos que llegaron a la Sierra desde el exterior en
un avión donde trajeron armas, municiones y otro útiles.
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