Con información de Zenovio Hernández Pavón
1920
fue el año de inicio de una nueva era en el mundo: surgió la radio difusión y
con ella el inicio de los medios de comunicación masiva. Lógicamente antes ocurrieron otros
momentos claves en esa historia: en 1887 el físico
inglés David Hugnes inventó el micrófono y en ese mismo año el alemán Hertz
descubrió las ondas radioeléctricas que llevan su nombre. Luego
Alejandro Volta construyó la primera pila o batería eléctrica y el ruso
Alejandro Popov realizó otros aportes igual de significativos.
Y así llega 1895: el italiano Guillermo Marconi
realizó las primeras pruebas de transmisión con las hondas descubiertas por
Hertz, (de ahí que Marconi se considere el inventor de la radio, aunque este no
habría podido hacer nada sin los aportes anteriores a él). Posteriormente el norteamericano Lee de Forest inventa la
lámpara de tríodo, que fue la base para los radio receptores.
LA GENTE COMENZÓ A HACER
MAGIA
Era magia pura lo que consiguió Marconi, utilizando
aparatos muy raros, una persona hablaba en una habitación y se oía en la otra,
utilizando para la recepción aparatos iguales de extraños. Y en diversas partes
del mundo la gente comenzó a jugar con el invento: como podían, ensamblaban las
piezas y hacían radio y se divertían.
Y no habría pasado de ahí si no es que el dueño del
supermercado cercano se percató que si anunciaba por el invento los productos que
tenía a la venta, tendría mayores ganancias, y por eso dio dinero a los que
jugaban para que ampliaran la potencia. Ahora hablaban en una habitación y se
oía en todo el barrio, y después más allá, hasta que un día el aire se llenó de
sonido.
1920
En ese año surge la primera emisora comercial en
Pittsburg, Pensilvania, Estados Unidos, que se identificaba como la
KDKA. Y desde ese instante la radio difusión
dejó de ser el juego de muchos y se convirtió en el gran negocio de unos pocos.
En Cuba también jugaron a emitir señales al éter…
uno de ellos era el
eminente músico y patriota de la guerra independentista del 1895, Luís Casas
Romero.
En 1920 junto a su hijo Luís Casas Rodríguez, Luís
Casas Romero instaló en su casa habanera la pequeña planta transmisora Q2LC que
tenía 5 watt de potencia y comenzó a transmitir de forma muy irregular, o sea
que hizo unas muy pocas transmisiones y
dejó de hacerlo para unos meses después salir del aire nuevamente y,
nuevamente, parar el juego.
Dos años después, Luís Casas Romero construye una
nueva planta radiotransmisora, la 2LC, que alcanzó 10 watt de potencia. Esta
segunda emisora se mantuvo al aire de forma regular desde el día de su primera
salida, el 22 de agosto de 1922. Por eso esa es la fecha que se considera el inicio de la radio
difusión en Cuba.
Diecinueve días después surge una nueva emisora de
radio en Cuba, PWX, propiedad de la compañía telefónica norteamericana asentada
en la Isla.
LA
RADIO EN HOLGUÍN
En 1923 Marcos Grave de Peralta trajo la primera
planta de radio aficionados y la instaló en la calle Miró esquina a Luz y
Caballero: solo que era esa de muy escasa potencia, que a lo único que llegó
fue a desatar la fiebre por la radiodifusión en los vecinos de la ciudad… Inmediatamente
otros varios lo intentaron e hicieron transmisiones que se oían a unos cientos
de metros de distancia
Hasta que en 1930 llega a la ciudad Matías Vega Aguilera.
Matías Vega Aguilera vino a Holguín proveniente de
Santiago de Cuba, donde, para la fecha ya existían 6 emisoras con transmisión
regular. (Y ninguna en los otros municipios de la provincia de Oriente).
El recién llegado trajo tecnología que le habían
proporcionado los agentes de los aparatos Philips y los instaló en la azotea
del Hotel Telégrafo, ubicado donde ahora está el centro cultural Benny Moré y
desde el restaurante del hotel hizo la primera transmisión el día 2 de septiembre de 1930.
La nueva emisora se diferenciaba de los primitivos
intentos holguineros en la tecnología, la potencia y el objetivo, que era crear
una emisora de radio comercial en la ciudad, la séptima emisora de radio que
habría en Oriente, de ahí que sus promotores tuvieron que solicitar al Ministerio
de Comunicaciones el permiso para usar el espacio radioeléctrico. Ese ministerio
le asignó como siglas de identificación: CMKF. La
C correspondía al indentificativo de América, M a Cuba, K a
Oriente y F por ser la séptima letra del alfabeto: (No olviden que era esa la
séptima radioemisora de Oriente).
OTROS NOMBRES DE LA NACIENTE RADIODIFUSIÓN
HOLGUINERA
Aunque traía equipamiento aportado por la marca
Philips, Matías Vega Aguilera necesitaba encontrar en Holguín quienes le
ayudaran a instalar los aparatos, y los encontró: entre ellos Eusebio Cuesta, a
quien todos en Holguín conocían como Nene Cuesta. Este hombre había estudiado
radio por correspondencia. Otro que ayudó a instalar la radioemisora fue el
ingeniero Manuel de Jesús Góngora.
Ingeniero Manuel de Jesús Góngora |
Pero la CMKF no dio las ganancias que Matías Vega Aguilera creyó. Por eso, un mes después, vendió la emisora al ingeniero Góngora.
Nacido en Matanzas en el año 1886, el Góngora se
formó en la Universidad
de La Habana,
y a la misma vez estudió piano con Ignacio Cervantes. Contratado como ingeniero
en la construcción de la carretera central, llegó a Holguín y se quedó en esta
ciudad hasta el año de su muerte, ocurrida en 1965.
Los Góngora tenían otras entradas económicas y, porque
eran aficionados a la música, asumieron la radioemisora como el juguete
familiar que en lugar de ganancias le daba pérdidas. Y a la vez que sus hijos fueron
creciendo, el ingeniero Góngora los mandó a la Universidad a formarse
como profesionales. Todos ellos regresaron graduados y pusieron negocios en la
ciudad. Manuel de Jesús Góngora Mason, el mayor, se hizo ingeniero como el
padre, Arturo, puso una agencia de
Seguros, Carlos, una oficina de Cubana de Aviación y Guillermo un bufete de
abogado. Y a la vez que atendían sus negocios, todos trabajaban en la emisora
de la familia. Beatriz del Barrio, esposa del hijo mayor del viejo Góngora,
contó que su esposo, cada noche, sintonizaba emisoras norteamericanas y
traducía al español las informaciones. De esa forma el noticiero matinal de la CMKF estaba más actualizado
que los periódicos locales y nacionales. El locutor de ese noticiero era el muy
talentoso y notable locutor Ibrahim Urbino. De Urbino deberemos hablar en este
u otro post, por ahora basta que digamos que fue uno de los más grandes
locutores de la radio cubana.
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Revista
Mil Amigos de Holguín:
Ingeniero MANUEL DE GONGORA MASON,
…con espejuelos negros coopera a la luz del progreso urbano en la Ciudad heroica.
Ingeniero MANUEL DE GONGORA MASON,
…con espejuelos negros coopera a la luz del progreso urbano en la Ciudad heroica.
El Patronato “Mil Amigos de Holguín”,
en su plan de obras que se están desarrollando, hubo de necesitar de los
servicios de un profesional apto y capacitado y lo encontró, para su más grande
satisfacción, en la persona del Sr. Manuel Góngora Mason, especializado en la
ciencia de la ingeniería de calles y carreteras.
El Sr. Góngora, con un interés que
raya en lo extraordinario, se le ve diariamente trabajando en la labor
directriz y técnica de las iniciativas del patronato.
El Sr. Góngora, que quiere tanto a
Holguín como si hubiera nacido dentro de sus límites, que le ha consagrado a su
Pueblo adoptivo sus mejores años y energías físicas e intelectuales, no
escatima tiempo al Patronato ni exige nada en su propio beneficio, como no sea
el de apresurarse a terminar cuanto antes y magistralmente las obras que se le
han confiado, para que Holguín vea y palpe la grandeza moral y material que
encierra dicho Patronato.
Ahí, en esas calles arregladas y que
están por mejorar, está la cooperación profesional de quien como el Ingeniero
Manuel Góngora Mason, honra con su conducta y proceder ciudadano a la Sociedad holguinera.
Manuel Góngora Masón |
Revista Mil Amigos:
CMKF es la decana de nuestras
emisoras. En Octubre de este año [1953] cumple veintitrés años de labor
continua y esforzada en beneficio de nuestro pueblo.
Fue fundada por el Sr. Manuel de J.
Góngora y actualmente la administra su hijo, Arturo de Góngora Mason [en la
foto]
Día a día, infatigablemente, con una
persistencia heroica, repite C M K F su grito desesperado clamando justicia
para “la ciudad más sucia y abandonada de Cuba”, y todo buen ciudadano debe
agradecer ese mensaje de hondo fervor holguinero.
Las campañas de C M K F han prendido
en el pueblo que mira a la prestigiosa entidad radial con cariño y admiración.
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Carlos Góngora Mason, el segundo hijo del ingeniero
Góngora y dueño de las oficinas de Cubana de Aviación en Holguín, además se
desempeñaba como administrador de la emisora. En 1934 Carlos contrató al sagaz
periodista Manuel Pérez Calderín para que redactara el noticiero de la CMKF. Ese noticiero se
mantuvo al aire por 25 años y en la década del 50 alcanzó los primeros lugares
de audiencia.
Se recuerda asimismo la muy popular “Hora
Evangélica”, de 1933. Después la
CMKF también tuvo “la Hora Católica” en el
que participaban aficionados a la música acompañados al piano por Luz María
Ortiz. (Fue esa mujer quien organizó el primer coro que tuvo la radio
holguinera). El locutor de la Hora Católica
fue Eduardo Pupo Sauco. Pupo Sauco llegó a ser uno de los más experimentados
locutores que tuvo la radio holguinera a lo largo de toda su historia.
Otro escuchado programa era el que realizaba el
periodista Eduardo Pérez Fernández titulado “La Hora Trinidad y
hermanos”. En este Pérez Fernández leía encendidos discursos patrióticos, Pura Pelegrín ofrecía recetas de cocina y la
escritora y periodista Marta García Ochoa radiaba notas sociales y sobre la
mujer y la cultura. Sin embargo lo que hizo verdaderamente célebre al programa
fueron los comentarios políticos que entre 1933 y 1934 escribió y leyó el
luchador antiimperialista y primer alcalde socialista que tuvo Holguín, Luís
Masferrer Landa.
En enero de 1935 los Góngora cierran la emisora para
instalarle un transmisor de mayor potencia. Al regresar al éter sale al aire
por los Mil 363 kilociclos y se hace audible en todo el norte de oriente, e
incluso, en días con buenas condiciones atmosféricas, se oía en otras regiones
del país. Y entonces sí que la emisora comenzó a reportar ganancias a sus
dueños, sobre todo cuando lograban contratar anuncios comerciales, políticos o
religiosos.
Para tener nuevas audiencias y para mantener la que
habían conseguido, los Góngora comienzan a diseñar una programación
eminentemente musical. Actuaban agrupaciones y solistas holguineros que
alcanzaron gran popularidad, entre ellos el célebre Ángel Alberto Caisés,
conocido en Holguín como el Cojo Caisés. Caisés mantuvo un programa diario a través de la CMKF desde 1931 hasta 1933
que salía al aire de 8 a
9 de la noche y que tenía como locutor el dueño de la emisora, el ingeniero
Góngora. El tema de presentación de ese programa era la popular guaracha del
Cojo que se titula “La Media Naranja”.
También eran habituales en la CMKF las orquestas Avilés y los
hermanos Coayo, los trovadores Tomás Guitián, Enrique Escobar y Guillermo
Sánchez, los cantantes Diego García Benítez, Tito Álvarez, Elvirita de Zayas,
Riancho Fellé, Manuel Feria y Eugenio Escobar, (Escobarito). Este último fue
uno de los más grandes intérpretes holguineros de la música campesina.
LA CMKO
Video promocional por los 80 años de la CMKO (2016)
Desde el día de su fundación y durante los seis
años siguientes, la CMKF
fue la única emisora radial que tuvo Holguín. Pero el 1ro de agosto de 1936 se
produce otro hecho memorable en la historia radial de esta comarca holguinera,
ese día Manuel Angulo Farrán
saca al aire su emisora, la CMKO.
Nacido en 1907, Angulo Farrán era un sencillo
trabajador que desde 1933 se desempeñaba como agente en Holguín de los
populares radios Atwater Kent, que, prácticamente sin respaldo económico,
emprendió el proyecto de fundar otra emisora de radio. Pero, dicen, era Angulo un
hombre que contagiaba con su pasión por todo lo que se proponía, de ahí que
muchos de sus amigos decidieron ayudarle: entre ellos, de forma muy especial,
la familia Pérez Diego, propietarios de la Ferretería La Llave.
En el patio de su casa, que quedaba dando el frente
al parque Martí, había un molino de viento. A la torre del molino Angulo le
añadió unos tramos más y allí colocó la antena de la emisora que aspiraba poner
a funcionar. Después enfrentó la burocracia del Ministerio de Comunicaciones
para conseguir el permiso de transmisión y finalmente el sábado 1ro de agosto
de 1936 sacó al aire por los 1280 kilociclos y con un cuarto de kilo de
potencia, la segunda señal de radio comercial que tuvo la ciudad. Las primeras
piezas musicales que se escucharon el día de la inauguración fueron Campanitas
de Cristal y el danzón Cuyaguateje, dos de las piezas preferidas de Angulo.
Luego le siguieron otras piezas interpretadas por un grupo de artistas de la
localidad que siempre estuvieron vinculados a la emisora, entre ellos el
pianista Edmundo García, que luego fue director de la popular orquesta Mundo y
su príncipes, el imitador de instrumentos musicales con la voz Mérido Gutiérrez
y el cantante de tangos Andrés Grimal.
Fueron fundadores de la CMKO el operador de audio
José Piñón, el periodista José Imperatori y los locutores Miguel Naranjo y
Arturo Torres. A ellos se sumaba el dueño, quien se desempeñaba en los
controles de audio, la locución y dirección de los noticieros, principalmente
el que se tituló “Diario de Holguín”, que salía al aire diariamente a las nueve
de la mañana.
Para pagarle a quienes le habían ayudado con el
dinero que necesitó, sobre todo a los dueños de la ferretería La Llave y asimismo porque era
Angulo el agente en Holguín de los radios Atwatter Kent, su emisora se
anunciaba diciendo: “Esta es la
CMKO, la voz de oro de los radios Atwatter Kent,
transmitiendo desde sus estudios en la ferretería La Llave”.
Desde su inauguración la CMKO fue llamada “La Emisora del Pueblo”, pues
Angulo dedicó toda su programación a divulgar los más anhelantes intereses de
los trabajadores, campesinos, estudiantes y pueblo en general.
Entre los primeros programas de la CMKO que alcanzaron
popularidad estuvo el que se titulaba “La hora X”. En ese cantaba Monina
Betacourt, una de las más bellas voces holguineras de los años 30.
Un año después de la inauguración de la emisora, la
revista habanera Radio Guía publicó por primera vez la programación de la
CMKO. Las emisiones comenzaban a las nueve
de la mañana con “la Hora Informativa”,
y los sábados y domingo salía en su lugar “la
Hora Edén”, que era un espacio
musical. A las diez “la Hora de los Trovadores
Holguineros”. A las once “la Hora Artística” con
Mundo García y su piano. A las doce “la Hora Edén”. A la
una “la Hora Sublime”,
con artistas variados. A las tres de la tarde música variada grabada. A las
cinco, los martes y jueves, “la Hora Adventista”. A las
ocho de la noche los miércoles, la Orquesta Avilés
en vivo, a las nueve el Quinteto
Rival y a las diez las interpretaciones del cantante Pepillo Angulo con el
acompañamiento del guitarrista Eduardo
Hechavarría.
En 1938 surgió “La Hora de la Hermandad de los Jóvenes cubanos”, un espacio
dirigido por Jacobo Urbino y conducido por Ibrahim Urbino que combatió la
elección de Fulgencio Batista como presidente del país en el período 1940-1944.
1938, EL AÑO DE LA CORTE SUPREMA DEL ARTE
“La Corte Suprema del Arte” fue un programa muy
popular en el concursaban aficionados al canto de la poderosa cadena nacional
CMQ. Y acto seguido todas las radioemisoras de Cuba crearon programas
semejantes. Los ganadores en las radioemisoras de Holguín generalmente tenían
como premio ir a La Habana
para competir en el programa de la CMQ. En
esta comarca ganaron y ganaron también en “La Corte Suprema del
Arte”, Mérido Gutiérrez y Raúl Ferrero.
Después Mérido compuso excelentes boleros y
canciones y creo diferentes agrupaciones musicales y Raúl Ferrero se convirtió
en uno de los intérpretes cubanos de mayor reconocimiento en la década del 50.
1939: LA CMKO
TRANSMITE EL PRIMER RADIO TEATRO
El cuadro de comedias o grupo de aficionados a la
actuación fue creado por el actor Eleno
Álvarez, quien era mayormente conocido como Martinelli.
Sin embargo cuando se hable de la historia de los
grupos dramáticos de la radio en el norte de Oriente hay que mencionar, porque
fue mucho mejor que el creado en Holguín, el creado en la primera emisora de
Banes por el actor catalán Carlos Riú
y donde surgieron actores de relevante carrera, entre ellos Antonio Betancourt, quien luego
fue un exitoso escritor de radio emisoras de La Habana y de San Juan, en
Puerto Rico y Romilio Márquez
de quien más adelante nos ocuparemos.
LA
DECADA DE 1940 FUE
CUANDO SE CONSOLIDA LA RADIODIFUSION HOLGUINERA
Por entonces habían los grandes monopolios radiales
de La Habana, la RHC cadena Azul, la CMQ, Unión Radio y en Santiago
de Cuba la célebre Cadena Oriental, crearon filiales en las principales
ciudades del país, o lo que es igual, que tuvieron transmisores que repetían su
señal, por lo que llegaron a ser Cadenas Nacionales: eso, obviamente, les
permitió contar con grandes audiencias y patrocinadores comerciales y políticos
en todo el país. Es ese el período de los grandes jerarcas de la radio difusión
cubana, donde figuran los muy conocidos: Amado Trinidad, Goar Mestre y Gaspar
Pumarejo.
Para la fecha Holguín era el segundo municipio de la Isla en cantidad de población,
lo que sumado a su posición geográfica en el centro del Oriente cubano,
convierten a este en el principal pueblo de toda la extensa comarca: por ello
las grandes cadenas radiales convirtieron a este en un enclave importante.
En 1940 la RHC
Cadena Azul instaló en la ciudad de Holguín uno de sus
transmisores repetidores. Luego otras grandes cadenas hicieron lo mismo. Incluso,
varias de esas grandes emisoras abrieron cabinas o estudios desde los que
transmitían noticieros y otros programas que se oían en toda Cuba. A la vez
varios holguineros que se habían marchado a La Habana para trabar en la
radio alcanzaron notable popularidad, entre ellos el célebre locutor Ibrahim Urbino, el cantante Tito Álvarez y el actor banense Romilio Márquez.
Romilio Márquez surgió en la emisora banense CMKX donde animó programas infantiles,
musicales y humorísticos. Pero en vista de que no conseguía anunciantes, la
emisora cerró sus puertas y fue vendida a un comerciante bayamés que la
trasladó a esa ciudad. (Hoy la
CMKX es la cadena provincial de radio en Granma). Cuando la
emisora cerró en Banes, el Romilio Márquez se marchó a La Habana con un muy popular
personaje que había creado, Pamela,
que era una ocurrente jamaiquina que muy pronto le granjeó una extraordinaria
popularidad a su actor.
Tito Álvarez se había iniciado como aficionado en la CMKF holguinera, donde a finales de 1939 lo descubrió un agente de la CMQ y lo contrató. Muy poco después el holguinero se convirtió en uno de los principales intérpretes de compositores como Orlando de la Rosa y Mario Fernández Porta. En 1940 la revista radial Ondas dijo que Tito Álvarez y Ramiro Gómez Kemp eran los dos cancioneros cubanos de mayor fama y prestigio artístico que, dice la revista, “vienen alternando en los programas de las sonrisas Colgate con sin igual acierto”.
E Ibrahim Urbino se convirtió en muy notable
locutor, (lamentablemente el texto clásico de la historia de la radio en Cuba,
escrito por Oscar Luís López, no lo menciona).
Urbino nació en Holguín en el año 1915 y murió con
67 años en 1982. En 1940 pasa a trabajar a la poderosa RHC Cadena Azul, donde
logró tener uno de los sueldos más altos de la historia de la radiodifusión
cubana y una popularidad como muy pocos la tuvieron, sobre todo cuando su voz
era la que decía: “Flash,
flash, última hora”. La
lectura muy rápida de las noticias, que nadie como él podía hacer, provocó que
su estilo se convirtiera en paradigma de la locución noticiosa en Cuba. El 19
de octubre de 1940 la revista Ondas, que se dedicaba únicamente a publicar
informaciones sobre la radio, sacó una foto de Urbino en su portada a la vez
que decía: “Ibrahim Urbino personifica al locutor perfecto: capacidad y
responsabilidad son sus principales virtudes”.
Poco después de llegar a La Habana el locutor
holguinero se casó con la más importante bolerista de la historia del género en
Cuba: Olga Gillot. Y cuando su fama y talento lo habían llevado a la cúspide,
Ibrahim Urbino renuncia a su alto salario en la RHC Cadena Azul y
acepta la propuesta que le había hecho el Partido Socialista Popular de dirigir
la radio emisora Mil Diez. Desde su nuevo Urbino defendió causas populares a la
vez que descubrió e hizo entrañables a artistas que luego tendrían renombre
internacional, entre ellos al Benny Moré a quien el holguinero bautizó como el
Bárbaro del Ritmo.
Paco Aguiar Suñol |
Otro de los locutores descubiertos por Ibrahim
Urbino desde su puesto de director de la Mil Diez fue el casi perfecto Manolo Ortega.
EL CINE TEATRO DE LA CMKO
Seguidora de los postulados de la Mil Diez, en Holguín,
durante los años de la década de 1940, la CMKO había adquirido experiencia y organización.
Entonces surge uno de sus más singulares programas: el cine teatro. La emisora proyectaba películas que veía el
público asistente y a la vez transmitía el audio por sus ondas con un narrador
que explicaba lo que los oyentes no podían ver.
Otro programa muy escuchado de la emisora en esos
años fue “La Hora
del partido Socialista Popular”, en el que se denunciaban los atropellos que se
cometían contra los campesinos, los desalojos y la corrupción imperante en los
círculos gobernantes.
Sin embargo no eran los programas hablados los que
ocupaban la mayoría de sus horas de transmisión, sino los musicales. Muy famoso
fue el que salía de 11 a
12 del día con el Conjunto Sonora
Holguinera, una agrupación que dirigía Eugenio Solares. E igual otras agrupaciones y solistas
contaron con espacios fijos: Ofelia
Vicench, David Virreyes,
Delia Urbino, Manolo Proenza, Rina Cruz, Raúl Ferrero, Guillermo
Sánchez y la Orquesta Tentación.
Los domingos de 3 a 4 de la tarde salía al aire por la CMKO el programa patrocinado
por la Ferretería La
Llave, en el que tomaban parte los
hermanos Pérez Diego, los
hermanos Grimal, las recitadoras Vilma
Pérez Anazco[*]
y Celina Toranzo y cantantes
como Jaquelín Pavón, Hilda Miranda, Publia Rojas, Rafael Morejón y Juan Cagigal.
Durante todos esos años también era común que los
estudiantes del Instituto de Segunda Enseñanza, los de la Escuela de Comercio y los
de la Escuela
del Hogar acudieran a los estudios de la CMKO a criticar los malos planes de estudio que
padecían y la expulsión de jóvenes revolucionarios.
Igual la
CMKF era portavoz de reclamos populares, sobre todo la
pavimentación de las calles de la ciudad y la necesidad de construirle a
Holguín el acueducto y el alcantarillado.
En esa década de los años 40 la CMKO amplió su colectivo de
trabajo. Entre otros se incorporaron los locutores Alberto Velásquez, Castelar
de la Peña,
Mario Hernández y Amaro García, los sonidistas Víctor García, Alfredo Ferreiro, Segundo Eladio Osorio y Douglas Almaguer, y escribían
libretos Salvador Hernández y
Celina Toranzo. Esta última
fue la autora de una de las primera radionovelas que se produjo en Holguín, titulada
“La Fuente del Destino” y la actuaron un
grupo de aficionados entre los que se recuerda a Vilma Pérez Anazco, Celio
Téllez, José Isidoro Urbino
y la propia Celina Toranzo.
En 1948 la
CMKO produce una segunda radionovela, esta vez con guión de Justo Aguiar Suñol titulada; “Noche sin aurora”. La actuaron
el propio Justo Aguiar Suñol
y su joven esposa Vilma Pérez de
Aguiar, Alfonso Quintián,
Julio David, Celina Toranzo y Rigoberto González Miranda.
Rigoberto González Miranda fue un locutor bilingüe de estilo original y gran
creatividad que dio un importante impulso a la radio holguinera, es su nombre
otra de las grandes catedrales de la radio en esta zona del país que, asimismo,
fue maestro formador de una generación de locutores, y junto a él hay que
mencionar hay que mencionar a los también locutores Eduardo Pupo Sauco y Amable
Martínez. Este último fue un
bayamés que llegó a la radio de Holguín en 1945 y allí emprendió varios e
importantes proyectos radiales con un gran sentido comercial. (Más adelante
volveremos a hablar de él).
LA SEDE LA DE CMKF
ES AHORA UNA CREMERIA FAMOSA.
El 21 de noviembre de 1938 LA CMKF se muda a una nueva y
definitiva sede en la calle Frexes, esquina a Guiteras, exactamente donde luego
se construyó la cremería Las Torres. Para la fecha, la que había sido el
costoso juguete de la familia Góngora, se había transformado en un floreciente
negocio que dejaba buenos dividendos. De ahí que los dueños construyeron el
nuevo edificio. (Hasta el día de hoy, los estudios de la CMKF fueron los de mejor
acústica en todo el norte de Oriente y sus condiciones técnicas fueron las
mejores para su época).
En la fecha la emisora transmitía por los Mil 50
kilociclos y su programación entonces era la siguiente:
A las 7 y 30 de la mañana comenzaba su programación
con el célebre noticiero CMKF:
Heraldo Holguinero. A las 8: Música
argentina. A las nueve: La Típica del aire. A las 11 el Conjunto trovadores holguineros,
que hacía música bailable y que dirigía Faustino
Oramas, a las 12 y 30: El
Cabarets del Swing, con la mejor música norteamericana obtenida de los
discos RCA. A las 3 y media de la tarde: El
Ruiseñor de América, con discos de Pedro Vargas. A las 4 y media: Canciones y poemas. A las 5 y
30: Otro noticiero y a las 9 de la noche: un bailable con la orquesta Los Príncipes del son.
En 1947 los Góngora contratan como director
artístico a Paco Aguiar Suñol,
quien era entonces un joven locutor muy talentoso que había trabajado en
radioemisoras habaneras con el apoyo del también holguinero y muy popular Ibrahim Urbino. Este a su vez
contrata a un staff de jóvenes que imprimen cambios importantes a la radio
emisora, entre ellos los locutores, también excelentes actores, Rigoberto González Miranda, René Aguilera Martín, Henry García y Pura García. Con el nuevo
equipo, Paco hace cambios en la programación: comienzan a salir al aire, entre
otros célebres espacios, “El Ateneo Literario estudiantil”
en el que leen sus textos jóvenes como Luís
Pavón, Lalita Curbelo
y María de los Ángeles Fernández.
Esos jóvenes poetas también hacían adaptaciones para la radio de novelas y
cuentos de la literatura universal y cubana, que eran actuados por los
locutores de la emisora más varios aficionados que se le unían.
En ese tiempo también comienza a salir al aire por la CMKF el programa “Eglish American Club”, que se
transmitía completamente en inglés.
1940 EN HOLGUÍN
Los cambios que ocurrieron en las radioemisoras
holguineras durante esa década coinciden con cierto auge económico y cultural
que estaba viviendo el territorio. Para entonces se inauguraron escuelas e instituciones
importantes, entre las última destaca el Noveno Regimiento Militar, que tuvo
una excelente banda de música en la que se agrupaban instrumentistas que dejaron
su huella en la historia cultural de la ciudad: Jorge Varona, Francisco
García Caturla, Norman
Milanés y José Fernández.
(Este último, además, fue un destacado locutor de la CMKO).
En 1944 concluyó el periodo presidencial
constitucional del General Fulgencio Batista y llegó a la Primera Magistratura
el gobierno Auténtico de Ramón Grau San Martín. Contradicciones entre los
auténticos hizo que, precisamente en Holguín, el Partido Ortodoxo. La figura de
Eduardo Chibás al frente de ese partido y sus habituales visitas a Holguín
traen un fuerte movimiento en las opiniones. Las radioemisoras holguineras se
convierten en tribuna de varios políticos con importancia para la historia
nacional. Las antenas de la CMKO
se radicalizan y comienzan a emitir opiniones insobornables. La CMKF, igualmente, abre sus
micrófonos a jóvenes revolucionarios locales, entre ellos Pedro Díaz Coello y Reinerio Almaguer, este último
sostuvo en esa emisora desde 1948 hasta 1952 su formidable programa “Tribuna guajira”. El programa
salió de la programación de la
CMKF porque los Góngora lo decidieron así después del golpe
de estado de Fulgencio Batista. Igual es justo que digamos que después del Golpe
de Estado la emisora fue tiroteada una madrugada, para asustar a sus dueños y
obligarlos al silencio.
RADIO
HOLGUÍN
La
tercera emisora de Holguín se fundó a finales de 1949. Esa, que se identificaba
con las siglas CMKJ,
utilizaba los transmisores de la cadena nacional Unión Radio, por lo que venía
a ser como un servicio especial de ese poderoso monopolio para la región.
Ubicada
en la calle Libertad, frente al cine Baria, la nueva radioemisora cortaba la
señal de Unión Radio en Holguín y transmitía durante algunas horas programas
musicales con artistas locales y anuncios. Pero las veteranas CMKF y CMKO no se
dejaron arrebatar la audiencia. En octubre de 1951 la CMKJ concluyó sus
transmisiones. El lugar lo ocupó una nueva planta que surgió con una fuerza
tremenda: la CMDL Radio Holguín.
Fundada por un próspero comerciante pinareño
llamado Alfredo Sánchez Morejón
la emisora se convirtió en el mayor exponente de la radio comercial en el Norte
de Oriente, superando, incluso, a la hasta entonces poderosa CMKF. Radio
Holguín fue una emisora donde la crónica social burguesa y la profusión de
publicidad comercial y política ocuparon los principales momentos de su
programación. Asimismo sus principales programas se dedicaron a la promoción de
la música en inglés y la cultura norteamericana, pero la emisora nueva no
rompió del todo con el espíritu romántico de la radiodifusión local de los años
30… e incluso, abrió sus micrófonos a ciertas campañas que estaban a favor de
determinados beneficios para las clases pobres y de mejoras para la ciudad.
LA
NUEVA ERA DE LA
RADIO EN HOLGUÍN FUE DE UNA FEROZ
COMPETENCIA.
Por más de 25 años la CMKF no sintió que la CMKO fuera su competencia.
Pero cuando nace Radio Holguín se desencadena una feroz competencia por el
aire… Es ese el motivo por el que los expertos consideran que fue Alfredo Sánchez Morejón, quien
demostró a los holguineros que la radio era un gran negocio.
Lógicamente que para convertir a la suya en un
monopolio local, lo primero que tuvo que hacer Sánchez Morejón fue adquirir
tecnología radial de punta, adquirir un buen edificio para la emisora y
conseguir a los mejores artistas locales de la radio. Para conseguir esto
último tuvo que pagar salarios más altos que la competencia, y el dueño de
Radio Holguín lo hizo.
Al primero que compró fue a Amable Martínez, un locutor eficaz y con gran sentido del
negocio… lo último dicho fue lo que llevó a Sanchez Morejón a nombrar al
locutor, además, como administrador de su radioemisora. Entonces amable pagó
salarios nunca vistos en la radio holguinera y de esa forma llevó a Radio
Holguín a los ya muy famosos locutores Rigoberto
González Mianda, Paco Aguiar
Suñol, Rafael Urbino,
Emilio Castelar de la Peña, Fermín Chelala Aguilera y Haydé Lavernia. (Por cierto,
Haydée Lavernia fue la primera mujer con título de locutora que tuvo Holguín).
Todos los locutores mencionados, que formaron parte
del staff de Radio Holguín, estaban calificados como locutores “araña”, lo que
quiere decir que se podían desdoblar y a la vez que grandes locutores eran
sonidistas, guionistas, actores y directores. No obstante la emisora tuvo personal
especializado en la grabación y transmisión de sonido, entre ellos Beby García y José Isidoro Urbino.
Desde sus inicios Radio Holguín creó un noticiero
sensacionalista a la usanza de las grandes emisoras habaneras. Y así mismo
comienza a transmitir programas dramatizados, entre ellos el muy popular “La Holguinera”,
que era un espacio que dramatizaba sucesos de la crónica roja al estilo de la Guantanamera.
También se oían por la emisora dramatizaciones de
sucesos mundiales, adaptaciones de novelas famosas y la vida de grandes
personajes de la historia de Cuba, Calixto García, Antonio Maceo, José Martí. Los
guiones los escribían poetas, periodistas e historiadores de la ciudad, entre
los que estaban Luís Pavón, Lalita Curbelo, Pedro García Suárez, Williams Gálvez y los ya
experimentados Paquito García Benítez
y Salvador Hernández Hervaz.
En esos dichos programas se iniciaron en el mundo de la actuación Rogelio Leyva, Manolo Igarza, Yolanda Guillot…
Pero aunque fueron esos espacios muy escuchados, la
verdadera carta de triunfo de la emisora eran los espacios musicales, tanto que
Radio Holguín se anunciaba como la Emisora Musical de Oriente. Para conseguirlo su
dueño logró contratar y traer a la ciudad a las más cotizadas agrupaciones del
país, sobre todo cuando se acercaban los surveyes. (El survey era una encuesta
que realizaban empresas comerciales especializadas para saber cuáles eran las
radioemisoras de mayor audiencia. La que lo conseguía garantizaba mayor
cantidad de anunciantes).
EL SURVEY
El primero que se realizó en Holguín fue en el año
1948, entonces nada más existían en dos emisoras: la CMKO y la CMKF, por eso los dueños no
se interesaron. Manuel Angulo, siempre alejado al comercialismo, jamás le
importó la competencia, por lo que la
CMKF no tenía rival, de ahí que los Góngora no tuvieron que
hacer nada para ubicarse en el primer lugar.
Sin embargo cuando en 1951 surgió Radio Holguín,
los Góngora sí tuvieron que enfrascarse en la competencia y por eso
emprendieron reformas en su emisora. La más importante de todas fue comprar una
máquina grabadora de placas de acetato: desde entonces pudieron grabar con calidad sus
anuncios, spots, presentaciones de programas y la actuación de sus artistas. El
principal grabador de la CMKF
fue Manuel Carbona, gracias a
él todavía hoy se conservan grabaciones de las orquestas Avilés, Mundo y
sus príncipes, el Órgano
Hermanos Ajo y cantantes como Raúl
Camayd, Germán Piferrer
y Rina Cruz, entre otros.
Además para enfrentar la competencia, el dueño de la CMKF, contrató como director
artístico en el año 1952 al experimentado Paco
Aguiar Suñol y también a figuras locales valiosas como Raúl Camayd, Gloria Herce, Ester Mayo y Guillermo Sánchez. Con tal staff
el viejo Góngora apostó con el dueño de Radio Holguín doscientos pesos a que
iba a ganar el survey de ese 1952.
El enfrentamiento entre las dos emisoras lo
estimulaba la sección “Mundo Radial” del periódico local Norte. En una
entrevista que apareció en el periódico, Arturo Góngora dijo: “Si trabajamos con valores locales que se
presentan ante nuestros micrófonos durante todo el año, nuestro rating será
permanente y no sufrirá ninguna alteración. Además, es obligación de las radio
emisoras proteger a nuestros artistas, esos que viviendo en Holguín tienen el
derecho a una oportunidad para demostrar su talento”
Radio Holguín por su parte, inauguró una sala
teatro en la calle Frexes, entre Máximo Gómez y Mártires, exactamente donde
radica actualmente un taller reparación de enseres menores. Y desde allí comenzó
a transmitir su estelar “Teatro
Musical Conchita” donde vinieron a actuar los
Chavales de España, Roland Gerdau, Benny Moré, Olga Guillot, la orquesta
Hermanos Castro, Manolo Fernández, el cuarteto Llópiz Dulzaides y como
presentador contrataron a una celebridad de la locución en Cuba, el holguinero Ibrahim Urbino.
Lógicamente, los artistas locales boicotearon a
Radio Holguín, entonces su dueño, para complacerlos, contrató a valores del
patio que se abrían camino en la capital del país, entre ellos Raúl Ferrero y Rina Cruz y asimismo formaron el
Conjunto Radio Holguín bajo la
dirección notable pianista César
Morales. En el lo integraban grandes músicos locales como Juanito Márquez en la guitarra, Germán Pifferrer, Juan José Bringues y Robert Urbino.
La guerra del aire dividió a los holguineros en dos
bandos: uno consideraba que la estrategia correcta era la de la CMKF y otros que Radio
Holguín.
Era defensor de Radio Holguín el célebre locutor
Amables Martínez. El 23 de abril de 1952 aquel declaró al periódico Norte: “Antes de Radio Holguín a la ciudad se
traían los artistas de otros países solamente en discos y a los artistas
locales nada más se les pagaba 17 pesos al mes por una hora diaria. Sin embargo
en solo ocho meses radio Holguín cambió ese estado de cosas y nos ubicamos en
la primera emisora de la ciudad y la segunda en la competencia contra las
emisoras nacionales”.
Seguidamente le ofrecemos información para que
compare la programación musical de CMKF y Radio Holguín durante la semana que
transcurrió del 5 al 10 de mayo de 1952.
RADIO HOLGUÍNDe 12.30 a 1.30 de la tarde: Orquesta Los Perversos, de Puerto Padre.De 1.30 a 2.00 de la tarde: Actuación del cancionero Raúl Ferrero con el Conjunto de Radio Holguín dirigido por el maestro César Morales.De 7.00 a 7.30 de la noche: Actuación de la gran bolerista Olga Guillot presentada por su esposo y muy célebre locutor de RHC Cadena Azul: Ibrahim Urbino.De 8.30 a 9.00 de la noche: programa “El astro y la dama” con el muy popular cancionero holguinero Tito Álvarez, que entonces triunfaba en toda Cuba como artista exclusivo de RHC Cadena Azul y la también holguinera triunfadora en RHC Cadena Azul: Rina Cruz.De 9.00 a 10.00 de la noche: Actuación en vivo de la Orquesta Avilés.Y desde las 10.00 y mientras tuvieran audiencia: Programa buscando estrellas, (un concurso de intérpretes).
CMKFDe 12.30 a 1.30 de la tarde: Actuación de la orquesta Mundo y sus Príncipes.De 1.30 a 2.00 de la tarde: Actuación del Conjunto Trovadores Holguineros de Faustino Oramas.De 7.00 a 8.00 de la noche: Actuación de Gloria Herce y Raúl Camayd.De 8.00 en lo adelante: Espacio patrocinado por la tienda “La Época” en el que actuaba como estrella principal el corner Ricardo Guillén.
Al amanecer del 17 de junio de 1952 todos los
artistas locales, y sobre todo los dueños de las radio emisoras esperaban con
ansiedad la salida del periódico Norte, donde se publicaría el resultado del
survey. A las siete de la mañana los vendedores de periódicos corrían por todas
las calles anunciando que había ganado Radio Holguín…
Según el periódico radio Holguín había ganado el
primer lugar entre las emisoras locales y el segundo lugar contra las emisoras
nacionales… o sea, que en Holguín los oyentes solamente preferían por encima de
Radio Holguín a la CMQ.
Entonces todo el mundo pensó que concluía la guerra
del aire, pero cuando tuvo todos los detalles el viejo Góngora hizo ver a todos
que el Noticiero de la CMKF,
que llevaba 18 años al aire, había conquistado el uno en audiencia y que su
emisora había ganado 21 cuartos de hora, por tanto tenía el primer lugar. Entonces
el dueño de Radio Holguín acudió a los expertos de la agencia encuestadora y
estos le hicieron ver que la CMKF
tenía el uno de audiencia en el horario de 10 y 30 de la mañana a 6 de la
tarde…
Y ya el viejo Góngora iba a festejar cuando los
expertos de la agencia le informaron que a pesar de lo anterior, Radio Holguín
habían ganado 32 cuartos de hora, por tanto era la emisora ganadora. Al día siguiente
el periódico Norte publicó en primera plana una fotografía en la que se veía al
dueño de la CMKF
entregando al dueño de Radio Holguín los 200 pesos que había apostado.
EL PROGRAMA MAS POPULAR DE LA RADIO EN HOLGUÍN DURANTE
EL AÑO 1952
Aunque Radio Holguín ganó el survey de 1952, el
programa más popular de la radio holguinera en ese año, con unos 50 mil
oyentes, según la encuestadora, era el noticiero de la CMKF, que salía al aire de 5.00 a 5.45 de la tarde.
Ese no era tan radical como el que transmitía la CMKO, pero también era
portavoz de muchas causas honestas y denunciaba con valentía la corrupción y la
miseria del pueblo. Su realizador, el periodista Manuel Pérez Calderín fue el
creador del celebre lema de la emisora que decía: “Transmitiendo desde Holguín,
una ciudad de 70 mil habitantes y que solo tiene un camión para recoger la
basura”. (Cuando
en 1957 Holguín tuvo tres camiones para recoger la basura, la CMKF cambió su lema. Quien nunca cambió su lema fue la CMKO: Diciendo con valor lo que otos callan por temor).
RADIO
HOLGUÍN, CADENA NACIONAL
Después
del survey de 1952, la emisora siguió subiendo la parada: era la gran
aspiración de su dueño crear una cadena de emisoras para transmitir un programa
que tendría a los productos Conchita como principales patrocinadores. Para
conseguirlo mandaron hasta Santiago de Cuba a Rigoberto González Miranda y Amable Martínez. Ambos locutores eran los brazos derechos
del dueño de Radio Holguín, sobre todo Amable Martínez, quien, incluso, llegó a
incursionar con éxito en la composición musical: en 1957 un bolero suyo
titulado “Llanto de luna” fue
interpretado por la
Orquesta Hermanos Castro, llevando al autor a la cima de la
popularidad. Y como locutor era tan ágil que todavía los actuales trabajadores
de la radio recuerda la siguiente anécdota: un día durante la transmisión del
programa de Amable Martínez que solamente transmitía música norteamericana,
hubo un apagón. Al volver la corriente Amable Martínez improvisó la siguiente
“mención”: “han escuchado ustedes un
excelente solo de silencio por una cortesía de la compañía eléctrica del Norte
de Oriente…”
EL
PROFESOR ABDUL KHAN
Otra
figura decisiva para Radio Holguín fue Fermín Chelala Aguilera, (1912-1984).
Hijo de un comerciante libanés establecido en Holguín, este enfermero de
profesión, junto a su hermano mayor José, ingresó en organizaciones comunistas
y promovió actividades culturales y educacionales. Cuando fue Concejal del Ayuntamiento
pagó con su salario un maestro para que enseñara a leer y escribir a los niños
pobres que vivían en los barrios periféricos de la ciudad.
En
1939 Fermín debutó en el primer Cuadro de Comedias que hubo en la radio
holguinera, organizado en la CMKO
por Martinelli, y luego se hizo locutor de la radio base “Propagandas Sincronizadas Otero” que creó su cuñado, el periodista y locutor Miguel Otero Bargalló. Cuando
Fulgencio Batista dio su artero y oportunista Golpe de Estado en 1952, el
Concejal Fermín Chelala fue uno de los que lo condenó con mayor ímpetu.
En
diciembre de 1952 su programa “El Profesor Abdul Khan”, que transmitía Radio
Holguín, a las 12.20 del medio día, se convirtió en la más grande sensación del
momento. Chelala interpretaba a un beduino que todo lo veía y oía y que hacía
severas críticas al régimen imperante. Dicen que en más de una ocasión los
trabajadores de la planta tuvieron que detener a curiosos y defensores del
General Batista que querían descubrir la identidad del que representaba al
árabe llegado a la ciudad. Y en enero de 1953 el Consistorio local acusó de
difamación al “Profesor” por las críticas que le hizo a la Compañía Eléctrica
del Norte de Oriente. La respuesta de Chelala fue publicada en el periódico
Norte del día 26 de marzo: “Esos ediles fueron los nombrados por Batista y
alcalde Guarro Ochoa, por lo que ellos no pueden pedirle cuentas a quien fue
electo por voluntad popular y que es fiel seguidor de la Constitución y las
leyes que pisotearon los hombres del tristemente célebre madrugonazo”.
Dados
los problemas políticos que trajo el programa, el dueño de la emisora obligó a
Chelala a que el programa tomara otro derrotero. Entonces aquel fue “La Escuelita de Abdul Khan” al que iban
niños aficionados a la música, el teatro y la declamación. En La Escuelita… se iniciaron
numerosos artistas holguineros; muchos de ellos, después de demostrar sus dotes
eran llevados por Chelala a espacios de la radio y televisión nacional y
asimismo hacían presentaciones en teatros de Holguín, La Habana y otras ciudades del
país. Grandes triunfadores de La
Escuelita… fueron los declamadores Paula Sera y Paquinín
Expósito, el intérprete William
Cordero y el pianista Daniel
Rodríguez Milord. Pero la verdadera celebridad, que se inició con Chelala
en su programa de radio, fue una niña habanera que frecuentemente visitaba a
sus familiares en Holguín. Al paso de los años esa niña se convirtió en una de
las cuatro joyas del Ballet Nacional de Cuba, su nombre fue Mirta García.
Entre
los programas dirigidos a los niños “La Escuelita…” fue el mejor de todo el periodo pre
revolucionario en su región, continuador de otros que en la década de 1930
salieron al aire por la CMKF
y la CMKO, “El Tío Noel” y “El Abuelito y sus Nietos”.
RADIO
HOLGUÍN SE CONVIERTE EN CADENA PROVINCIAL Y FRACASA. SU DUEÑO LA VENDE.
A
pesar de los esfuerzos de su dueño, Radio Holguín nunca llegó a tener las
condiciones de organización de la CMKF. Su
sede estuvo en tres locales diferentes, de los que hablaremos ahora de dos de
ellos: primero en la calle Libertad, después al lado del restaurante “la Granjita”, en calle
Máximo Gómez, casi esquina a Frexes.
En
1953 Sánchez Morejón logró crear una cadena provincial de radio al fundar
emisoras en otros municipios orientales (Las Tunas, Baracoa). Pero el proyecto
no encontró respaldo en el comercio local, por lo que decidió venderlas,
incluyendo en el paquete a Radio Holguín. Su nuevo dueño fue Justo Milá, quien
además era propietario de una popular tienda de la ciudad, “La Creación”.
Cuando
Milá compra la emisora, la lleva a residir en los altos de su tienda (y esa fue
la tercera sede que tuvo), pero todavía siguieron realizando programas en otros
sitios por la estrechez del lugar. Y asimismo el nuevo dueño contrata como
director del noticiero al periodista Nicolás
de la Peña Rubio. Desde
entonces la emisora se acerca a las más capas humildes de la sociedad
holguinera, pero no deja de ser la planta más representativa de la burguesía
local.
RADIO
NORTE
Un
aporte menos significativo fue el que realizó Radio Norte (1956-1962), emisora
de la ciudad de Holguín dedicada casi exclusivamente a la música instrumental y
a los anuncios. Aunque en ella trabajaron declamadores como Mario Limonta, Félix González Vega y Yolanda Guillot.
El
más célebre de sus programas lo patrocinaba la lechería Maceo y comenzó a salir
al aire en 1957 desde las ocho hasta las once de la noche desde una cabina de
cristal ubicada en un modesto centro recreativo al lado de la Ferretería “La Sucursal”, actual heladería Numa. Ese se
llamó “Radio Espacio Maceo” y en él actuaban solistas y tríos. Sus
realizadores eran Francisco Aguiar
Suñol (locutor y director) y Luís
Enrique Ochoa (sonidista).
LA LUCHA CONTRA LA TIRANÍA (1955-1958). LA RADIO.
En 1955 se funda el Movimiento 26 de Julio en
Holguín. La CMKO
le abre sus micrófonos a los principales líderes y también a los de las
asociaciones de estudiantes, obreros y campesinos: Reyniero Almaguer, Pedro
Díaz Coello, Luís Peña.
Luego, temerosos de posibles represalias de los revolucionarios, y conocedores
de que la aplastante mayoría estaba a favor de la lucha, los dueños de las
otras emisoras también dieron acceso a las fuerzas políticas opuestas a la
dictadura. Para hacerlo evitarse la reacción del Ejército, en ocasiones
simularon asaltos de los revolucionarios.
Según el testimonio del dirigente revolucionario Antonio Pérez Herrero, quien le
abrió las puertas de Radio Holguín fue su administrador Amable Martínez. “En esa emisora, precisa, teníamos los
domingos en la mañana un espacio que era parte del programa de unidad de las
fuerzas revolucionarias, en el que participaban Rubén Pérez Calderín, Carlos
Pargas, Luís Peña, Reynerio Almaguer y Pedro Díaz Coello. Cada uno
llevaba su parte escrita en la que expresaba su opinión sobre hechos ocurridos
durante esos días”. Asimismo el revolucionario dijo: “Los domingos en la tarde participé muchas veces en el programa que Pedro Díaz Coello tenía en la CMKO llamado Trinchera Cívica”.
El Jefe del Movimiento 26 de Julio en Holguín, Pedro Díaz Coello, mantuvo desde
1954 y hasta su muerte, ocurrida en 1956, una activa vida de periodista
militante en la prensa escrita y radial; llegó a hablar a través de todas las
radioemisoras de la ciudad y en otras de Santiago de Cuba condenando la
opresión con palabras precisas, sinceras y profundamente martianas. Ello
provocó que las fuerzas del régimen siguieran de cerca sus pasos. Algo similar
ocurrió con Luís Peña y Reynerio Almaguer.
Cuando los más visibles revolucionarios de la
ciudad fueron asesinados y la censura lo permitió, Manuel Angulo sostuvo sus ideales a través del noticiero y
otros espacios de su emisora. Angulo era el financiero del M-26-7 y en su
emisora nucleó un grupo de luchadores clandestinos que emprendieron tareas de
impresión de documentos, recolección de dinero, armas y medicinas para enviar a
los rebeldes que estaban en la Sierra
Maestra, repartir proclamas, etc.
Asimismo Angulo colaboró en los preparativos del
ajusticiamiento al criminal Jefe del Regimiento en Holguín, Coronel Fermín Cowley Gallegos.
El 9 de diciembre de 1957 fue uno de los seis revolucionarios asesinados para
atemorizar al pueblo que luchaba abiertamente. Al triunfar la Revolución su emisora
recibió el nombre de Radio Angulo
como permanente tributo.
En las restantes emisoras, en más de una ocasión,
periodistas y trabajadores también alzaron sus voces contra los desmanes del
régimen militar, entre ellos Fermín Chelala,
Manuel Pérez Calderín, Luís Pavón y Nicolás de la
Peña Rubio, (este último, con la
colaboración del corresponsal Mario
Vaillant, fue el primero en denunciar a través de Radio Holguín, el
asesinato de los expedicionarios del Corynthia.
LAS EMISORAS REBELDES EN HOLGUÍN
Al igual que en la Sierra Maestra, en las zonas de
operaciones del Ejército Rebelde que estaba en las inmediaciones de Holguín
surgieron varias emisoras de radio que contribuyeron a consolidar las fuerzas
revolucionarias que luchaban contra los cuerpos represivos.
Las tropas del capitán
Orlando Lara, que durante un tiempo operaron en el suroeste de la
actual provincia, contaron con la primera de aquellas emisoras rebeldes. Esa la
construyó el holguinero Miguel Boffil
“con un convertidor de corriente de modo que se podía operar lo mismo con el
acumulador de un automóvil que con corriente eléctrica”. A su invento el
holguinero la llamó “Radio Llano
Rebelde”; cuando este fue a trabajar a Radio Rebelde lo sustituyó Rafael Cruz.
A finales de octubre de 1958 aparecieron otras
plantas semejantes en el territorio del IV Frente Oriental Simón Bolívar, que
actuaba en los municipios de Holguín, Gibara, Las Tunas y Puerto Padre. Estas
emisoras servían para que los jefes rebeldes se comunicaran entre sí y a la vez
transmitían mensajes, partes de guerra, daban instrucciones a los demás jefes
guerrilleros, orientaban al pueblo de lo que estaba ocurriendo en los frentes
de combate y se unían a Radio Rebelde para formar “La Cadena
de la Libertad”
Seguidamente las seis emisoras rebeldes que
actuaron en el IV Frente Oriental:
- Emisora 7-H-N (Siete halcones negros), posteriormente denominada RCAC (Radio Comandante Andrés Cuevas): pertenecía al tercer pelotón de la Columna 14 “Juan Manuel Márquez”, (el pelotón) lo dirigía el entonces Capitán Eddy Suñol. Fueron sus operadores Jorge Luís Jomarrón, Orestes Leyva y Julio Negreira.
- Emisora R-4-S-B (Radio Cuarto Frente Simón Bolívar). Esa era una planta móvil atendida por Joel Díaz Tamayo.
- Emisora de la Columna 32 “José Antonio Echevarría”, donde trabajaban Abreu y Pupo.
- Emisora 2-A-V (Dos Águilas Verdes) de uno de los pelotones de ka Columna 14. La operaba Enrique Segreo.
LA
RADIO EN LA REVOLUCIÓN
En octubre de 1958 las fuerzas rebeldes mandadas
por el capitán Eddy Suñol volaron
las torres conductoras de electricidad, la ciudad quedó a oscuras durante los
tres meses siguientes y las emisoras tuvieron que silenciar sus transmisiones. Con
la excepción de las señales de las radio emisoras rebeldes, en Holguín se
produjo un sepulcral silencio durante el tiempo de duró la falta de
electricidad. Por ese motivo ninguna radio emisora local pudo dar a conocer el
triunfo de la revolución.
Casi al anochecer del primero de enero de 1959 los
trabajadores de la CMKO,
con el locutor Mario Hernández
al frente, consiguieron trasladar hasta el local de la emisora, en el parque
Martí, una planta eléctrica que estaba en los bajos del Ayuntamiento. La
emisora volvió al aire. Y 6 de enero, que es cuando se restablece la corriente
en la ciudad, regresan el resto de las emisoras.
En marzo de 1960, por iniciativa de Fidel Castro,
se crea el Frente Independiente de Emisoras Libres, conocido por sus siglas
FIEL. El frente tenía como lema: “FIEL a Cuba, FIEL a la Revolución”, y su
principal labor consintió en enfrentar las campañas difamatorias contra la
revolución que estimulaban, sobre todo, la gran burguesía y los magnates de las
radio emisoras ubicadas en La
Habana.
Por justicia y para honra de los radialistas de
Holguín, en las radio emisoras de la ciudad fueron muy escasas las campañas
difamatorias porque la mayoría de los periodistas y trabajadores de las radio
locales militaban abiertamente en las filas revolucionarias.
El abierto enfrentamiento de los grandes emporios
radiales a la Revolución
motivó que en noviembre de 1960 el Gobierno Revolucionario dictó la Ley de intervención de todas
las emisoras de radio del país. Y en marzo de 1962 la Dirección del país crea
el Instituto Cubano de Radiodifusión (ICR) (Hoy Instituto Cubano de Radio y
televisión, ICRT): este organismo agrupó a las emisoras de radio y televisión y
de inmediato comenzó la transformación de su programación para convertirlas en
baluarte de la cultura y de la nueva ideología que se implantaba en el país.
Cuando se crea el ICR en Holguín se decide unificar
en una sola las cuatro emisoras de la ciudad que eran entonces: Radio Norte,
Radio Holguín, CMKF y CMKO. Actuando en una sola esa se identificaba con las
siglas de Radio Holguín: CMDL y como nombre: Radio Angulo. Se transmitía desde
el mejor de todos los estudios radiales de la ciudad, el de la CMKF, ubicado donde ahora
está la Cremería Las
Torres.
Pero en esa etapa de reorganización, se cometieron
errores que todavía hoy siguen considerándose como lamentables. Entre ellos el envío
hacia Santiago de Cuba de la única máquina grabadora que había en Holguín y que
había pertenecido a la CMKF. Y
otro, quizás el peor, fue permitir que en enero de 1964 se trasladara la
emisora a un local sin ninguna condición técnica ni acústica, que estaba
ubicado en la antigua tienda Modas Milá (donde actualmente está Pico Cristal).
Los excelentes estudios que habían pertenecido a la CMKF fueron demolidos.
En la antigua “Modas Milá”, un entusiasta colectivo
de periodistas, locutores y directores de programas comenzaron una nueva etapa
para la radio local: pese a la falta de recursos, al ruido de los vehículos al
cruzar por la calle del frente y a otros mil obstáculos, se confeccionó una
programación variadas con espacios dirigidos a todos los sectores sociales.
Aquella primitiva Radio Angulo se hizo célebre por
las transmisiones en vivo a través de controles remotos desde donde se
originaba la noticia: campos de caña, centros de trabajo y muy especialmente,
desde el Casana Club, un centro nocturno donde se presentaban excelentes shows
y las muy populares orquesta de Benny Moré, la Riverside, la Aragón…
Tan deficiente era el local que tenía la
CMDL Radio Angulo que un año después el
Gobierno del entonces Regional Holguín asigna otro donde antes hubo una tienda.
Ese es el que todavía utiliza, en la calle Máximo Gómez, entre las de Frexes y
Martí. En el año de su última mudanza se decide que por justicia Radio Angulo
debía identificarse con las siglas CMKO.
En 1976 el municipio Holguín se convierte en
capital de la provincia de igual nombre, por lo que la emisora pasó a ser
matriz de la cadena provincial.
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