LO ÚLTIMO

La aldea a la mano (Holguín, Cuba)

10 de febrero de 2017

Biografía del Ejército en Cuba, 1898-1958



Leer además: Holguín militar
Finalizada la guerra hispano-cubana-norteamericana se licencia el Ejército Independentista (mambises).

 

A partir de 1898 se desarrollaron estructural y orgánicamente las fuerzas armadas; 

Entre 1898 y 1901 se forma la Guardia Rural y la Policía Municipal;

En 1908 se estructura el Ejército Permanente, separado de la Guardia Rural, creándose una Compañía de Infantería en cada provincia; 

En 1909 se inicia el Servicio de Guardacostas y  la Marina de Guerra;

Por Decreto de 27 de Agosto de 1909 se fundó en el Castillo del Morro, en La Habana, la Escuela de Cadetes, de la que fue su primer Director e Instructor el capitán Frank Perker del 11no. Cuerpo de Caballería de los Estados Unidos[1];

En 1915 se unifica el Ejército Permanente y la Guardia Rural en el Ejército Nacional y se organiza su Estado Mayor. El Estado Mayor le dio coherencia y unidad a las tropas de guarnición que se habían iniciado al estructurarse la Artillería de Costa, la Infantería y los Tercios Tácticos, estos últimos como tropas de caballería;
José Martí Zayas Bazán
Un paso importante fue la instauración en 1917, durante el Gobierno del General Menocal, de la Secretaría de Guerra y Marina. Su primer titular, dicho sea de paso, fue el general de brigada José Martí Zayas Bazán, hijo del José Martí.
En 1918 se completaron las fuerzas fundamentales del país al surgir el Cuerpo y la Escuela de Aviación;
El 9 de noviembre de 1934, siete meses después de haber sido disuelto el Ejército Nacional, se aprobó la Ley Orgánica mediante la cual se daba vida al Ejército Constitucional y al Servicio de Inteligencia Militar[2]. Este último fue la entidad más preparada por el Estado Mayor del Ejército y cuya misión era informar al Estado Mayor y operaba en servicios relacionados con la estabilidad de la Nación;
Durante la Segunda Guerra Mundial, el Ejército Constitucional cubano sufrió cambios en su organización y estructura, su Jefe, Fulgencio Batista se vio obligado a preparar su Ejército con la profesionalidad que el Sistema Interamericano de Defensa imponía a los ejércitos latinoamericanos por la situación de guerra vigente.
General Fulgencio Batista
En 1940 Batista es electo Presidente de la República y comienza su mandato tomando una serie de medidas para fortalecer la institución armada que se encargaría de proteger sus intereses. Exactamente en ese año comienzan a desaparecer los Tercios Tácticos, seguramente que por la experiencia de la Guerra que demostró lo obsoleto de esa fuerza en las nueva s condiciones del combate moderno;
Asimismo reorganizó la Guardia Rural,  instituyó el grado de general, creó el Cuerpo de Aviación del Esta do Mayor del Ejército, se aprobó una nueva Ley Orgánica y se dio vida otra vez al Servicio Militar, que tuvo dos variantes, el Servicio Militar de Emergencia Obligatorio y el Servicio Militar de Emergencia Voluntario, como dos fuerza s orgánicamente independientes y constituyó seis Regimientos, cuatro de Servicio Militar de Emergencia Obligatorio (Regimientos 10; 12; 13 y 14) y dos de Servicio Militar de Emergencia Voluntario, (Regimientos 9 y 11); el Cuerpo de Oficiales subordinados de esta fuerza se formó mediante un curso de seis meses del que salieron graduados más de 120 segundos tenientes, grado transitorio para el Servicio Militar de Emergencia;
A partir del golpe militar del 10 de marzo de 1952, el dictador Fulgencio Batista lleva a cabo otra serie de cambios organizativos y funcionales dentro del Ejército que condujeron a su modernización: elaboró una nueva Ley Orgánica agrupando a las fuerzas de artillería, infantería y caballería en las fuerzas terrestres, diferenciando de ellas a la Guardia Rural que quedó como cuerpo destinado al orden interior. Surgió la Fuerza Aérea del Ejército en sustitución del Cuerpo de Aviación por la Ley Decreto No. 15 del 18 de Abril de 1952, publicada en la Gaceta Oficial del 23 de Abril, que derogó el Decreto Presidencial 854 del 28 de Marzo de 1945[3]. Además incrementó la participación de las instituciones y sus jefes en la vida nacional.
En 22 de Julio de 1953 la Gaceta Oficial, en edición extraordinaria, dio a conocer el Decreto-Ley No.975, también conocido como Ley Orgánica del Ejército, del Ministerio de Defensa[4]. Esta definió en su Artículo No. 2 que el Ejército estaría conformado por el Estado Mayor del Ejército, las Fuerzas Terrestres (agrupación de infantería, caballería y artillería), las Fuerzas Aéreas, las Fuerzas de la Guardia Rural, los Cuerpos, los Servicios, la Reserva (Reserva Militar que estaba integrada por los retirados del Ejército y por el Servicio Auxiliar Femenino) y las Agrupaciones Especiales. Con la aplicación de esa dicha Ley se produjo un cambio en la denominación de la jefatura del Ejército: el Estado Mayor General comenzó a llamarse Estado Mayor del Ejército y en este radicó la dirección técnica y la conducción de las operaciones militares. Dicho Estado Mayor del Ejército estaba integrado por una jefatura y cinco direcciones: Personal (G - 1), Inteligencia (G - 2), Operaciones (G - 3 ), Logística (G - 4 ) e Inspección (G - 5 ). La Ley Orgánica estuvo vigente hasta finalizar la guerra.
En 1955 Batista continúa fortaleciendo su ejército; para ello modificada y perfecciona la Marina de Guerra a tal punto que en 1956 esa era considerada la más poderosa del Caribe. Poseyendo 43 unidades de superficie, de ellas un crucero, el Cuba, que era la unidad más antigua, botado en 1911, reconstruido en 1936 - 37 y modernizado en 1956; tres fragatas botadas en la Segunda Guerra Mundial y modernizadas en 1956, dos buques de patrulla y escolta, uno de ellos modernizado en 1956; catorce guardacostas; dos guardacostas auxiliares; dos lanchas torpederas; doce lanchas patrulleras, de ellas siete construidas en Estados Unidos en 1956, dos buques de servicio de faros, tres embarcaciones de servicios auxiliares y dos buques de rescate y salvamento[5]. Estas eran las fuerzas con las que el gobierno esperaba destruir los intentos de los opositores, y en realidad no eran pocas.

 “El tiempo que medió entre la desaparición del Ejército Libertador y el surgimiento del nuevo ejército cubano, posibilitó a los Estados Unidos impedir que a la nueva institución armada llegara el influjo independentista, revolucionario y nacionalista de su antecesor, [el Ejército Mambí]. Pero la ruptura no solo fue en este sentido, sino que también el naciente ejército rompió de forma abrupta con las tradiciones de la lucha y el Arte Militar mambí, para asumir totalmente el pensamiento militar norteamericano”[6].
Solo que la asunción del arte militar norteamericano no ocurrió durante un corto período, sino que más bien se desarrolló como un proceso que maduró a medida que avanzó el siglo XX hasta los años treinta y cuarenta y comienza a concretarse con la llegada de los primeros profesores venidos desde los Estados Unidos, y con ellos se asimila sus estructuras y métodos académicos a partir del estudio por manuales traducidos del inglés.
En los años cincuenta eso se convertiría en un factor en contra del régimen: Cuando las guerrillas dirigidas por Fidel Castro, recuperaron la tradición militar que llegaba del siglo XIX y pusieron en primer plano los métodos de los ejércitos que luchan en desventaja, esto es, la guerra de guerrillas, impusieron al Ejército Constitucional cubano un tipo de  guerra para el que no estaba preparado.




[1] Memoria de la Escuela de Cadetes. Curso 1952-1956. p.37
[2] Enrique Buznego y Luis O. Eiró: El Ejército de la tiranía: sostenedor de la dictadura militar y de los intereses de la oligarquía nacional y el imperialismo. Imprenta Central de las FAR, 1987. Pág. 54.
[3] Gaceta Oficial de la República de Cuba. 23 de abril de 1952. Pág. 7489.
[4] Roberto Pérez Rivero: Ob. Cit. Pág. 32.
[5] Alberto Ferrera Herrera: El Granma: La Aventura del Siglo. Editorial Capitán San Luis, pp.82-83 y 116.
[6] Pérez Rivero, Roberto: Desventura de un Ejército. Editorial Oriente, Santiago de Cuba, 2003, Pág. 26.

8 de febrero de 2017

Calixto García. Biografía. 54


1880, Marzo 26
Calixto parte hacia Cuba
Al fin, a las ocho de la noche, se congregan en un muelle de New Jersey un valeroso grupo de 26 cubanos, que dos horas más tarde se hacen a la mar. El general viste pantalón y camisa grises, calza zapatos de pelotero y se toca con sombrero de castor. Cada combatiente lleva una bolsa con cien tiros.
En un remolcador, burlando la vigilancia de las autoridades yanquis, el general se dirige hacia la goleta que le espera mar afuera.
Se quedan Carlos Roloff y José M. Aguirre

Circunstancias imprevistas impidieron que los patriotas Carlos Roloff y José M. Aguirre lo acompañaran.
Desde el remolcador Calixto le escribió a Leandro Rodríguez. “Estoy desesperado por haberse quedado Roloff y Aguirre, no solo por la falta que me hacen; sino por la mala posición en que quedan. Trate de embarcarlos para Jamaica, por el vapor del martes, que así tal vez puedan ir con Bonachea. Mande la adjunta [carta] a mi esposa”.
El General nada más deja a los suyos por herencia 48 latas de leche condensada
En aquel final de invierno durante el cual el General se marchaba de Norteamérica, Isabel quedaba sola otra vez, con un niño de dos meses de nacido, al que el padre, antes hacendado y señor de esclavos y ganado, solamente le dejaba por herencia, 48 latas de leche condensada.
1880, Abril 4

Desafortunado desembarco en Cuba
Después de las peripecias naturales de viaje tan arriesgado, están prestos a desembarcar. Han llegado frente a las costas de Cuba, en un punto ubicado entre Aserradero y Punta Brava. Bajan un bote. Los primeros hombres llegan a tierra y ya comienzan a bajar el segundo contingente, pero teme el General no poder bajar lo que llevan por allí y decide mandar a buscar a los que estaban en tierra. Ya viene el bote de vuelta cuando ven una luz cerca que crece: se trata de un crucero español que se acerca. Por órdenes de Calixto el barco en el que viajan suelta las velas y se da a la mar, sin tiempo para recoger a los hombres que volvían. No paran hasta Jamaica[1].
El gobierno inglés en Jamaica confisca la goleta
El general y el resto de los hombres, en Jamaica, escondieron los pertrechos y luego perdieron la goleta, confiscada por el gobierno inglés.
1880, Abril 24
Después de agotadores esfuerzos, el General pudo conseguir un bote con capacidad para una docena de hombres, y en esta fecha zarpó rumbo a Cuba con quince compañeros. Pero todavía surgen nuevos contratiempos: a varias millas de la costa jamaiquina se les rompe el mástil y tienen que retornar a remo.
1880, Mayo 4
Los expedicionarios reanudan el viaje: ahora son 19 hombres.
1880, Mayo 7
Definitivo desembarco en Cuba
El general Calixto García desembarca en Cuba, en un lugar situado entre Aserradero y Cojímar. Un autor español dijo que “había desembarcado a solo dos kilómetro del más poderoso de los fuertes que tienen los españoles en toda la costa del Turquino. Para entonces el movimiento revolucionario ya estaba extinguido”.
Martí saluda el desembarco de Calixto en Cuba
José Martí, optimista siempre, escribe en Nueva York cuando sabe del arribo de Calixto a Cuba: “¡Saludado sea el nombre que a todos enorgullece, saludados los que murieron esperándole…!
Sabida la llegada de Calixto, el Camaguey se alarma con la noticia, pero no secunda el movimiento por considerarlo prematuro. En Las Villas hay hombres sobre las armas: Carrillo en Remedios y Serafín Sánchez en Sancti Spíritus, pero no hay contacto entre villareños y orientales. Serafín dice a su madre por carta, sin saber nada de la llegada de Calixto: “Nos embarcamos mañana para el extranjero, lo que deseo con vehemencia, torturado mi corazón bajo el peso abrumador de negro descontento. La conciencia pública aprueba nuestra determinación por ser el único medio de evitar el suicidio inútil de los cuatro hombres que hemos quedado sin objeto sobre el terreno de honor”.
Proclama de Calixto recién desembarca
Tan pronto como el general García pone el pie en tierra cubana lanza una vibrante proclama, pero, sin que él y los suyos lo sepan, ya el movimiento había fracasado.



Anterior                                                            Siguiente




[1] Los patriotas del bote, llevados por la corriente, encallaron cerca de Cabo Cruz, pudiendo incorporarse a Goyo Benítez, que aislado ya en las montañas orientales, había perdido la esperanza de salvar la vida. Eran sus nombres: Ricardo Machado, Nicanor Ambrosio Santiésteban, Eugenio Carloto, Francisco Marrero y Francisco Moncayo.


Calixto García. Biografía. 53


1880, Enero ¿?
Nace Mario García Vélez
En el agitado mes de enero al General le nace otro hijo, al que nombra Mario. Entonces la ayuda de Argenta en los quehaceres de la casa fue indispensable. Dice Carlos García Vélez en su diario que la típica y sabrosa comida italiana inundó la mesa, ganando el gusto de Calixto, Isabel y los niños. (Ninguno de los golosos comensales podía imaginar que estaban acompañando al italiano en sus últimos días de vida. Natalio Argenta dio su vida por la libertad de Cuba).
1880, Enero
Para la fecha, enero de 1880, el admirable golpe inicial de finales de agosto del año pasado, (inicio de la guerra en Cuba), podía ser abortado si no acaba de llegar a la isla el apoyo eficaz del exterior. 
Una noche antes de la salida de Calixto, van a visitarle a su casa Manuel Sanguily y Pío Rosado. Conversan los tres mientras Isabel cuida que los niños vayan a la cama y que no molesten a los mayores.
Sanguily expone sus dudas. Teme al fracaso… habla de traiciones y de fortísimas probabilidades de desastre. A lo que responde Calixto: “Lo creo Sanguily, creo lo que dice, pero tengo que ir”
1880, Marzo 23
Escribe el general desde Nueva York a Bavastro diciéndole que “una proposición ventajosa me hace fijar mi salida para el 26 de este mes”. Y, además, le dice que piensa llegar a las inmediaciones de Haití y enviar un bote a tierra con esta clave: “corre prisa”. Entonces el general Bonachea debe salir a mata caballo y que él estará bordeando dos o tres días esperándolo. “Si por desgracia, o bien porque se me presentare oportunidad, hubiera de desembarcar sin recoger a Bonachea, entonces mandaría desde Cuba, en bote, prácticos y dinero, para que Bonachea se me reúna”.
1880, Marzo 24
Carmen Zayas Bazán estuvo al lado de su esposo José Martí en Steck Hall
Leyó Martí en Steck Hall su texto “la situación actual de Cuba”.
Muchos años después escribió Carlos García Vélez en su libro de apuntes: “Le referí (a Néstor Carbonel) una omisión en su vida de Martí recientemente publicada, que asimismo otros biógrafos desconocen. Díjele que Carmen Zayas Bazán asistió al meeting de Steck Hall, sentándose en la plataforma al lado de Martí. Yo fui encargado por Martí para recoger banderas cubanas de las familias para decorar la sala y todo el día estuve cerca de los esposos. Ocupé con otros niños asiento delantero y doy fe que Carmen estuvo al lado de su esposo”.



Anterior                                                                                       Siguiente


LO MAS POPULAR DE LA ALDEA