Por
Isaíris Rojas París
Margarita París Johnson
(Esta monografía obtuvo el premio José
Manuel Guarch Delmonte)Eduardo García Feria muestra parte de su colección |
Durante los primeros años del siglo XX en el
territorio que hoy pertenece a la provincia de Holguín varias personas
coleccionaron y exhibieron piezas (arqueológicas, naturales y otras). La
mayoría de estos lo hacían con el propósito evidente de divulgar la información
que de aquellas poseían o con eldeseo de que los demás vecinos supieran que
eran poseedoresde esos objetos, generalmente únicos. Lo útil es que fueran
cualquiera de sus intenciones, los coleccionistas tenían fines públicos.
Entre ellos destacan los García Feria, que consiguió conformar una significativa colección y la fundación de un museo conocido con los apellidos del iniciador y padre de la familia, Eduardo García Feria y notablemente enriquecida por dos de sus hijos, José Agustín y Rolando García Castañeda.
Eduardo es reconocido como el primer y más importantecoleccionista holguinero. El inicio de su interés por esa labor ha sido fijado hacia 1902. Su colección fue completándose de dos formas, esencialmente: lasdonaciones de piezas encontradas casualmente por personas ahora desconocidas y las excavaciones.
Entre ellos destacan los García Feria, que consiguió conformar una significativa colección y la fundación de un museo conocido con los apellidos del iniciador y padre de la familia, Eduardo García Feria y notablemente enriquecida por dos de sus hijos, José Agustín y Rolando García Castañeda.
Eduardo es reconocido como el primer y más importantecoleccionista holguinero. El inicio de su interés por esa labor ha sido fijado hacia 1902. Su colección fue completándose de dos formas, esencialmente: lasdonaciones de piezas encontradas casualmente por personas ahora desconocidas y las excavaciones.
Una característica que diferenció la colección de otras muchas es que el poseedor anotaba todos los pormenores relacionados con las piezas recibidas, siendo la suya una práctica poco común entre los coleccionistas. Sus anotaciones o Catalogación es lo que ha llevado a que a García Feria se le considera un precursor de la Museología cubana.
De la alta estima que se tenía a la obra de los GarcíaFeria-Castañeda de Holguín dan fe varias de las cartas remitidas por importantes nombres del coleccionismo y las ciencias,que se conservan en el Museo Provincial de Historia de Holguín “La Periquera”. Lo mismo dirigidas al padre que a los hijos aparecen escritos en los que constantemente relucen términos evaluativos de la Colección como valiosa[1], magnífica[2] e invaluable[3].
Así le dice Cornelius Osgood a Pepito: “Estoy muy complacido por haber conocido lacolección que Ud. y su padre han organizado, y la considero como uno de los más extraordinarios logros de la arqueología en Cuba”[4].
Y Modesto Roca a Rolando:
“Le imagino trabajando intensamente en la
ordenación de sus vastas y magníficas colecciones, haciendo cada día más
conocido el nombre de su familiaque tan acertadamente ha sabido reunirlas y
presentarlas. En esas regiones han tenido la agradable ocasión de trabajar en un
campo poco menos queinexplorado, en el que a cada rato se reciben impresiones
muy satisfactorias. Tendría mucho gusto enconocer su museo antropológico, digo
arqueológico y el malacológico”[5].
Después que hubieron incrementado la
colección, al padre de los García Castañeda le nace la idea de exponer
permanentemente sus piezas en la sala de su casa. Entonces sus conocimientos en
el campo de la Museología eran totalmente empíricos, por lo que puso a la vista
lo que él consideraba más importante. Para que todo el que quisiera pudiera
mirar, las puertas permanecían abiertas desde las primeras horas dela mañana y
hasta el anochecer.
Para satisfacción de las motivaciones pedagógicas que Eduardo le daba a su exposición, muy pronto los alumnos de las escuelas de Holguín y de otras regiones cercanas comenzaron a asistir. Generalmente los maestros avisaban con anterioridad la intención de visitar el museo. Eduardo los esperaba y les ofrecía lo que hoy se denomina visita dirigida, explicándoles detalladamente todo lo que conocía sobre las piezas de la colección.
Posteriormente y sin abandonar jamás la atención a los niños de las escuelas, el museo superó esos marcos y se convirtió en un centro de obligada visita para muchas personas.
Las cartas conservadas dan fe de la opinión favorable: “[Es] uno de los museos privados de nuestro país, el mejor y más extenso”[6].
Antonio Ponce de León le dice a Pepito:
Para satisfacción de las motivaciones pedagógicas que Eduardo le daba a su exposición, muy pronto los alumnos de las escuelas de Holguín y de otras regiones cercanas comenzaron a asistir. Generalmente los maestros avisaban con anterioridad la intención de visitar el museo. Eduardo los esperaba y les ofrecía lo que hoy se denomina visita dirigida, explicándoles detalladamente todo lo que conocía sobre las piezas de la colección.
Posteriormente y sin abandonar jamás la atención a los niños de las escuelas, el museo superó esos marcos y se convirtió en un centro de obligada visita para muchas personas.
Las cartas conservadas dan fe de la opinión favorable: “[Es] uno de los museos privados de nuestro país, el mejor y más extenso”[6].
Antonio Ponce de León le dice a Pepito:
“Tenemos siempre la esperanza de visitar su
interesante museo en cualquier oportunidad, pues estimamos que instituciones
como la sostenidapor usted contribuyen grandemente a levantar el
prestigiocientífico de nuestro país”[7].
Eduardo García Feria falleció en 1941.
La prensa dela época se hizo eco del reconocimiento popular al fundador del
Museo García Feria y personalidades destacadasen el ámbito científico
lamentaron su deceso y exaltaron su extraordinaria labor de legar a la cultura
cubana y especialmente a la sociedad holguineras una colección colosal.
[1]Carta a José A. García Castañeda de Julián Vivanco, San Antonio de
losBaños, noviembre de 1940, en Museo Provincial La Periquera,Colección García
Castañeda, Fondo Correspondencia,Documento Número 091.1. Julián Vivanco
es el autor de: “El lenguaje delos indios
de Cuba”(1946), “Los indios
palafíticos de Cuba y los dujos ometates” (1950), “Indología cubana” (1952), “Las
raíces de la lingüística indígena de Cuba” (1953) y “Diccionario americanista. Deantropo, fito, zooy toponimias indígenas”
(1956). Miembro correspondiente de la Academia de Historia de Cuba en 1951.
[2]Carta a José A. García Castañeda de Antonio González Muñoz,Cienfuegos,
24 de agosto de 1943, en Museo Provincial La Periquera, Colección García
Castañeda, Fondo Correspondencia,Documento Número 024.4. GonzálezMuñoz:
coleccionista. Delegado de la Junta Nacional de Arqueología y Etnología por la
provincia de SantaClara; Delegado del Grupo Guamá en la provincia de Santa
Clara. Autor del texto “Asiento Cantabria”.
[3]Carta a José A. García Castañeda de Joaquín García, Nicaro, 19
demayo de 1945, Colección García Castañeda, Fondo Correspondencia,Documento Número 040.
García: aficionado a la Arqueología.
[4]Cornelius Osgood, New Heaven,Connecticut, 1 de julio de 1941, Colección
García Castañeda, Fondo Correspondencia,Documento Número 036. Osgood:
Arqueólogo, obtuvo su doctorado en Chicago en 1930. Fue Conservador de
Antropología del Museo Peabody de Historia Natural de la Universidad de Yale
entre 1934 y 1973. Con sus expediciones al Ártico, China y Corea proveyó de
importantes colecciones al Museo Peabody. Publicó destacados trabajos de los pueblos
de lengua atabascana en Alaska, participó activamente en la arqueología
venezolana y del Caribe.
[5]Carta a Rolando García Castañeda de Modesto Roca: Guanabacoa, 20de
mayo de 1939, Colección García Castañeda, Fondo Correspondencia,Documento Número.
116.2. Modesto Roca: reverendo padre, padre Escolapio; naturalista y
profesor de las Escuelas Pías deGuanabacoa. Fue rector de dicho centro entre
1928 y 1930. Miembro de la Sociedad Cubana de Historia Natural Felipe Poey.
[6]Carta a José A. García Castañeda de Augusto Fornagueras. Colección
García Castañeda, Fondo Correspondencia,Documento Número. 022.2. Fornagueras: Agrimensor,
residente en Pinar del Río; miembro de la Comisión Nacional
de Arqueología y laJunta Nacional de Arqueología y Etnología. Propietario
de una valiosa colección arqueológica privada formada con objetos encontrados
en dicha provincia.
[7]Carta a José A. García Castañeda de Antonio Ponce de León y Aymeé,
La Habana, 17 de abril de 1945. Colección García Castañeda, Fondo
Correspondencia, Documento Número 094.2. Ponce de León: Botánico,
director del Jardín Botánico de La Habana entre 1936 y 1961. Ocupó la
presidencia de la Sociedad Cubana de Botánica desde su fundación el 14 de juliode
1944 y hasta su muerte. Fue editor de la revista de dicha asociación. Publicó
valiosos artículos sobre la Sistemática, en especial de las Gimnospermas.
Miembro de la Sociedad Cubana de Historia Natural Felipe Poey.