Prensa desde 1900

26 de febrero de 2023

"PITIN” DE ZAYAS OCHOA

 Por: Juan Albanés

Rodolfo de Zayas y Ochoa, “PITIN” en el lenguaje del cariño, nació en esta ciudad de Holguín el día 4 de abril de 1861, en los instantes en que su pueblo celebraba a raudales de alegría el día del Santo Patrono.

Su advenimiento al mundo ocurrió en la antigua casona de Don Vicente Moyúa y Lengarán, en calle Libertad, hoy ocupada por el establecimiento de ropas “La Victoria”. (Actualmente la sede de los Escritores y Artistas, UNEAC)

Pertenecía a una distinguida y linajuda familia de esta localidad. Entre sus antepasados se contaba a Don Francisco de Zayas Bazán y Armijo, que durante diez y seis años fue Teniente Gobernador de Holguín y a cuyas gestiones se fundó la villa de Gibara, con la ayuda valiosa de Don Romero Francia.

“Pitín” de Zayas Ochoa, desde que era estudiante en la escuela de Don Tomás Jardines, sintió en su pecho el latido de amor a Cuba y juró por todo aquello que le era más sagrado y amoroso, luchar sin descanso por desencadenar a su tierra del cautiverio ibero.


ESPIONAJE

En los comienzos de la guerra del 95 este bravo mambí holguinero se apostaba en un cerrito situado al sur de Holguín, al fondo de la barriada de Pueblo Nuevo, y desde aquella atalaya observaba las entradas y salidas de las tropas, correos, paso de las acémilas y de los contingentes sanitarios, etc., datos que enviaba más tarde a las fuerzas cubanas.

Fue, pues, figura de cimería (Sic.) en el espionaje mambí de la guerra del 95, ayudándole en esta labor otro holguinero grande, Don Joaquín Romeu Alcalá.

En una ocasión, habiéndose estrechado la vigilancia de las tropas del regimiento “Habana”, de plaza en esta ciudad, “Pitín” empleó el siguiente ardid para burlar la acuciosidad del enemigo: apelaron a un voluntario, al cual rasuraron por entero la cabeza. Ya al “rape”, escribieron en el cuero cabelludo las señales  de las operaciones militares en clave.

A los pocos días el pelo cubría de nuevo el cráneo mondo. El voluntario cruzaba la línea de las alambradas y fortines y llegaba al Cuartel insurrecto, donde era de nuevo rasurado y traducido el mensaje en clave.

CORONEL JEFE DE CABALLERIA

Ansioso de servir a su Patria en el fragor de la pelea, se incorporó a las huestes mambisas, llegando a alcanzar el grado de Coronel Jefe de la Caballería de la Zona Occidental, operando en un encuentro contra tropas españolas en “La Entrada”, barrio de San Andrés, de este Municipio. En ese combate fue herido gravemente, lo que le impidió participar de la Invasión a Vuelta Abajo.

En la paz siguió sirviendo a la República. Entre los cargos que desempeñó están: Jefe de la Policía y Administrador de Correos de Holguín. 

Su fallecimiento fue en 10 de Abril de 1931. A su paso por esta vida dejó una blanca estela de patriotismo y amor por a Cuba de saludable ejemplo.

Nos inclinamos reverentes ante la memoria de aquel mambí que muchos timbres de honor dio a su lar nativo: Coronel Don Rodolfo de Zayas y Ochoa, “Pitín”

LA TRAGICA Y MISTERIOSA MUERTE DEL “COJO” MORA EN HOLGUIN DE 1893

 Por: Juan Albanés

Manteníamos el deseo de escribir sobre el asesinato de Rafael Mora Leyva, alias “El Cojo”, suceso que llenó de comentarios y comidillas una época y que ocurrió el 22 de agosto de 1893, siendo Alcalde Municipal de Holguín Don Manuel Nates y Bolívar y Teniente-Alcalde Don Eladio García Ureta.

Como en nuestra labor siempre hay personas de encantadora gentileza, dispuestos a tendernos una mano de ayuda, no pasamos “sofocos” en hacer acopio de datos sobre la muerte de “El Cojo”.

Sabíamos que el suceso había ocurrido en la última época alcaldicia de Don Manuel Nates y Bolívar. Y como Don Manuel dejó a un hijo, Don Arturo, Procurador Público, persona querida por todos, a él acudimos con la seguridad de que mucho “pescaríamos” en aquel mar.

Don Arturo Nates Perodín con sus setenta y dos años arriba, que parecen solo cincuenta, recuerda perfectamente los detalles de aquel asesinato. Además, posee los ricos archivos de Don Andrés Cansino, donde se narra minuciosamente, fecha tras fecha, los sucesos ocurridos en Holguín a fines del pasado siglo y comienzos del actual.

También Don “Fello” Urbino, que tiene la memoria feliz, nos aportó algunos datos suplementarios. Ya en terreno firme nos decidimos escribir unas líneas sobre “El Cojo”. Y aquí están…


EL HERMANO DEL “COJO”

Los Hermanos Rafael y Joaquín Mora Leyva estaban “fichados” por las Autoridades como ladrones de ganado o cuatreros, aunque en honor a la verdad, muchos de los desaguisados no fueron obra de los Mora. Como mismo pasó luego con el “cojo” Demetrio Ramírez, todas las culpas no iban al suelo… sino a la conciencia de los Mora.

Mucha “gente Grande” llegó a la conclusión de que la muerte de los Mora sería una bendición para gran parte del pueblo.


MUERTE DE JOAQUIN

En fecha 20 de febrero de 1893, en la esquina de las calles Cervantes y Frexes, según la moderna nomenclatura, Gumersindo Rosabal le “picó” pleito a Joaquín Mora Leyva. Rosabal tomó en sus manos un ladrillo, (otros dicen que un pedrusco), y se lo “encasquetó” en la sien a Mora. Este, con los sesos hechos un “salcocho” no tardó en entregar su ánima.

Rosabal buscó la manigua. (Y ese fue el trágico epilogo de Joaquín Mora Leyva, hermano del “Cojo”)


EL HOMBRE DEL CABALLO BLANCO

Rafael Mora Leyva arrastrando su pierna lisiada a consecuencia de un desdichado balazo en otras épocas, pasaba por el entronque de las calles Barcelona y Hernán Cortés, ahora Miró esquina a Arias, en aquella noche sin luna del 22 de agosto de 1893.

Se encontraba justamente frente a la tienda de víveres de Don José Agustín García Leyva, Alcalde de Holguín unos años más tarde, cuando un jinete montado en un caballo blanco, “carirredondo” como el caballo de bastos, cruzó frente al Cojo y…

El caballero “jaló” por un machete bien disimulado en la montura y mandó mortal golpe al desprevenido “Cojo”. La herida le interesó parte de la región del cuello, en la unión de éste con el tronco…

Ocurrió esto, nos dice Arturo Nates Perodín, a las siete y tres cuartos de la noche del citado día 22 de agosto de 1893.

Al tiempo del golpe, el jinete vomitó una indecencia: “Ahí te va esa, so…”

Y con la misma “picó” el caballo y se perdió por el rumbo poniente de la calle Hernán Cortés, hoy Arias, buscando los matojales donde se ubica ahora el Reparto Vista Alegre.

Los parroquianos de la tienda de Don José Agustín García Leyva, que apenas vieron el rápido hecho de sangre, dieron la voz de alarma.

Acudió el Alcalde Municipal Don Manuel Nates y Bolívar, por cierto, llevaba de la mano a su hijo Arturito.

“Se hará justicia”, gritó el Alcalde. Y ordenó que el agonizante “Cojo” fuera llevado al Hospital Civil, local ocupado ahora por el Asilo de Ancianos…

Allí lo atendió el Licenciado Faustino Sirvén Pérez Puelles. Pero no había salvación para el “Cojo”, que se le iba la vida por la herida en el cuello.

En unos vómitos de sangre, el rojo líquido bañó el delantal del Licenciado Sirven. El Cojo, mientras, en vano hacía esfuerzos para dar a conocer el nombre de su victimario. El Cojo gesticulaba gruñidos pero las palabras justicieras no salían de su garganta.

Según nos dice Arturo Nates Perodín, El Cojo falleció en la madrugada del 23 de agosto del año 1893. Era hombre fuerte como el jiquí y pudo dilatar, aunque en balde, su agonía.

¿Quién era el hombre del caballo blanco y rostro lleno como la luna? A ciencia y conciencia nadie lo sabe. Suposiciones las hay pero no seguridades.

Durante mucho tiempo, al caer la noche, nadie cruzaba por la esquina de Arias y Miró. Del lugar se decían cosas espantosas, fantasmales y uno creyó ver el “ánima” del Cojo arrastrando su padecida pierna sobre la empedrada calle…       

LA PRENSA EN HOLGUÍN. PRIMEROS PERIÓDICOS

 Por: Juan Albanés

LA LUZ

El primer periódico que tuvimos los holguineros vio el alba pública el veintinueve de MARZO de MIL ochocientos sesenta y dos, durante el progresista gobierno del Teniente Gobernador Don Juan Nepomuceno de la Huerta y Sostre. 

Su nombre era un bisílabo: “LA LUZ” y estaba bajo la dirección de Don Antonio José Nápoles y Fajardo, hermano del célebre poeta vernáculo y decimista “EL CUCALAMBÉ”. Tenía como Jefe de Talleres a Don José Ricardo Vázquez.

“LA LUZ” se publicaba los miércoles, viernes y domingos de cada semana, mediante suscripciones mensuales de dos escudos.

LA IMPRENTA se ubicaba en calle “Calvario” (Ahora Aguilera), entre Libertad y Maceo.

ABRAHAM PORTUONDO

“LA LUZ” contaba con el apoyo del Teniente Gobernador Don Juan Nepomuceno de la Huerta y Sostre, único asidero para que no naufragara la empresa. El Teniente Gobernador otorgó a “La Luz” la subasta para la publicación de bandos de Buen Gobierno, Resoluciones, Ordenes, Exhortos, Citaciones. En la imprenta se confeccionaban, además, los cedulones para fijar en lugares públicos.

Estos asuntos OFICIALES cubrían las tres cuartas partes del material redactivo (Sic.), inclusive la Portada, estando el resto consagrado a la estrecha vida comunal de la época.

Contábamos con un descriptivo y lírico cronista social: Don Abraham Portuondo Larrisagi, profesor del Colegio “San Juan Nepomuceno”, quien fue, también, el primer periodista fusilado por la fuerza española durante la Guerra de Yara.

“EL ORIENTAL”

En fecha 18 de septiembre de MIL ochocientos sesenta y dos se publicó el último número de “LA LUZ”. Pasó a ser “EL ORIENTAL”, pero sin ninguna otra variante.

“El Oriental” se publicó hasta OCTUBRE de MIL ochocientos sesenta y ocho, en que la toma de HOLGUÍN por las tropas mambisas interrumpió su curso.

La imprenta pasó a poder de los insurrectos, por conquista de guerra, sirviéndoles para imprimir en papel gaceta una hoja escrita por las dos caras con el nombre de “LA ESTRELLA DE CUBA”, bajo la dirección de Don Abraham Portuondo Larrisagi. 

  

(Publicado en el periódico NORTE, 29 de marzo de 1957)   

25 de febrero de 2023

LLEGADA DE LA CARRETERA CENTRAL A HOLGUIN

Por: Juan Albanés

Uno de los acontecimientos notables de nuestra Historia local: la inauguración de la Carretera Central, que nos puso en comunicación con todo el resto de la ISLA, tuvo lugar el 24 de FEBRERO de MIL novecientos treinta y uno, siendo Alcalde Municipal el Sr. Maximino Parra Zaldívar.



BENDICION DE LA IGLESIA DE SAN ISIDORO.

 Por: Juan Albanés

La segunda parte del capítulo tercero de su “Memoria sobre el ORIGEN de Holguín” la dedica el historiador Don Diego Salomé de Ávila y Delmonte a darnos breves detalles sobre la bendición y a la vez inauguración, de la iglesia de SAN ISIDORO. 

Tan pío local quedó en el servicio del culto en fecha 3 de ABRIL de MIL setecientos veinte, víspera del PATRONO SAN ISIDORO, diciéndose la primera Misa por el Párroco en propiedad, nombrado por auto de ONCE de ENERO de MIL setecientos diez y nueve, el Presbítero Don Juan González de Herrar y López, a quien le tocó el honor de ser el primer RECTOR y CURA de almas que tuvo la diócesis. 

La diócesis de HOLGUÍN pasó a ser la más extensa y dilatada de la provincia de Cuba (Santiago de Cuba), abarcando una superficie de doscientos cincuenta y cinco leguas cuadradas.


VISITAS PASTORALES

Antes de contar con una IGLESIA, los habitantes se conformaban con las llamadas “VISITAS PASTORALES”, cada tres o cuatro años. Cuyas visitas inició en primer término, el religioso cartujo, natural de Burgos, España, Don Fray Diego Sarmiento, el primer clérigo o cura en visitar las tierras del HATO de Holguín, (Hato fundado en MIL quinientos cuarenta y cinco, si nos atenemos al historiador Ávila). Continuaron las visitas PASTORALES bajo las cátedras de los OBISPOS Don Fernando de Urango, que duró poco en el cargo, el Dr. Don Bernardino de Villalpando, Don Juan del Castillo, Don Fray Antonio de Salcedo, Don Fray Bartolomé de la Plaza, Don Juan de las Cabezas y Altamirano, el Maestro Don Fray Alonso Enríquez, Don Fray Gregorio de Alarcón, Dr. Leonel de Cervantes y Carvajal, Don Gerónimo de Lara, Don Martín de Zelaya y Ocarís, Don Nicolás de la Torre, Don Juan Montiel, Don pedro de Reina Maldonado, Don Juan de Santos Matías Sáenz de Mañosca y Murillo, Don Fray Alonso Bernardo de los Ríos, Don Gabriel Díaz Vara Calderón, Don Juan García de Palacios, Don Fray Baltasar de Figueroa, Don Diego Avelino de Compostela, que fue cura de la iglesia de Santiago de Madrid y que bendijo la iglesia de “Managuaco”, la primera que tuvo el HATO pero no así la primera de nuestro valle de HOLGUÍN, y por último, Don Fray Jerónimo Valdés.

Cuando éstos OBISPOS, bien por su edad, sus achaques o los peligros del viaje, no podían hacer “visitas pastorales” al Hato de HOLGUÍN o fondos de San Salvador del Bayamo, como quiera llamársele, comisionaban a uno o más canónigos de la Iglesia CATEDRAL de Santiago de Cuba para que llenasen esos sagrados ministerios. Así, por ejemplo, en MIL setecientos el encargado de la VISITA PASTORAL lo fue el canónigo Presbítero Don Andrés de Olmos y Zapiaín, el mismo que gestionó y logró la construcción de las torres de la CATEDRAL (de Santiago de Cuba), destruidas en años atrás por un terremoto.  


LA BENDICION

El Obispo Don Fray Jerónimo Valdés, natural de Gerona, Cataluña, España, catedrático de Alcalá, Calificador de la Suprema Abad y OBISPO que fue también de Puerto Rico, bendijo la iglesia de SAN ISIDORO, revestido con todos los atributos de su cátedra: mitra, tiara, cayado y ornamentos.

Como no había “Cabildo, Justicias y Regimiento”, lo que no se logró hasta treinta y dos años después, en el acto se hicieron representar las Autoridades de la villa de San Salvador del Bayamo.

PRIMERA MISA

La primera MISA, con los oficios propios de San Isidoro, Arzobispo de Sevilla, que celebraba su día (CUATRO de ABRIL de MIL setecientos veinte), la rezó el Párroco en propiedad, Presbítero Don Juan González de Herrera y López, que desempeñó el cargo hasta su muerte, sustituyéndole el Presbítero Don Cristóbal Rodríguez y González y servida en una interinatura por el Presbítero Don Juan C. Brizuelas.


LA PRIMERA IGLESIA

La iglesia de SAN ISIDORO ha venido sufriendo renovaciones y transformaciones desde lejanas épocas. En MIL ochocientos quince fue totalmente transformada, adquirió las dos capillas, en MIL novecientos treinta y siete adquirió dos torres chatas. Los altares ídem. El altar de Las ANIMAS fue transformado por el Padre Germán Lence en altar del Cristo de Limpias, y lo propio hizo con el altar del Niño de Praga, que ahora es de la Virgen del CARMEN, bellísima obra tallada en caoba y costeada por la virtuosa Doña “Pepilla” Penín, ya fallecida madre de los dueños del central “Maceo”.

Leer más: Escultura religiosa en San Isidoto

  



(Publicado en el periodico NORTE 3 de abril de 1957)

ANUNCIOS PUBLICADOS EN HOLGUÍN EN 1888

 Por: Juan Albanés 

Del periódico “Cuba Española”, editado en esta ciudad de Holguín, órgano del Partido Unión Constitucional en nuestra comarca, año de 1888, tomamos varios anuncios de la época.

Era Director de “Cuba Española” Don Luis Arias y Forbenz.

DON JULIAN GARCIA ZABALLA

Julián García Zaballa gira LETRAS sobre todas las ciudades y pueblos de la Peninsula, Islas Baleares y Canarias. Además, gira letras sobre Francia, Gran Bretaña, Alemania, Imperio de Austria, Bélgica, Holanda y Suiza.

FONDA “LAS DELICIAS”

Fonda “Las Delicias” de Ramón Gutiérrez. Plaza de Armas de esta ciudad. Este establecimiento, montado a la moderna, ofrece a sus favorecedores y al público en general, un buen servicio, buen trato y módicos precios. Hay mesas redondas y separadas a gusto del consumidor.

Fonda “Las Delicias” de la propiedad de Don Ramón Gutiérrez.

Nota nuestra. Antiguamente el lugar donde se daba de comer y alojamiento recibía el nombre de FONDA, palabra derivada de FONDABLE, paraje donde dan fondo los barcos y éstos toman descanso de la navegación echando el ancla. Posada es mucho más antigua. Hoy en día se utiliza el vocablo HOTEL, que tiene origen francés.

EL PARAISO

“El Paraíso”, establecimiento de ropa, sastrería y camisería. De Campíns y Hernández. Calle del “Rosario”, esquina a la de “Cárcel”, (hoy Frexes esquina a Mártires).

Las últimas novedades en lencería, sedería, paños y bisutería. Completo surtido de sillones, sillas y albardas.

EL HERRERO TERÁN

El herrero Antonio Terán, con muchos años de experiencia en su oficio, se ofrece al público en calle de “Lealtad” (hoy Agramonte).  

DON EMILIANO ESPINOSA

Don Emiliano Espinosa y Aguilera, Notario Público por Oposición. Su estudio y domicilio en calle de “Concordia” (hoy Martí), casa contigua al “Casino”.

Nota nuestra. Don Emiliano Espinosa y Aguilera, uno de los hombres más acaudalados de su tiempo, murió arruinado en época de la República. Jamás “calentó” un centavo, y gastó en vida lo que ganó en vida, según sus frases.

YAGUAJAY

“YAGUAJAY”, Sociedad Agrícola Platanera de los Sres. Fuentes, Saínz y Núñez. Se solicitan urgentemente trabajadores. Se pagan a los mejores precios para desmonte, siembra de plátanos, coco y cacao. Se admiten contratistas. Informes en la Imprenta de “Cuba Española”.

CONSTRUYE MESAS DE BILLARES

Fermín Morera, con domicilio frente a la Plaza de San Isidoro, (hoy Parque Gral. G. de Peralta), construye mesas de billar dejándolas al gusto de sus compradores y presentando en ellas toda clase de imitaciones como caoba, caracolillo, meple, nogal, viene, ébano, palisandro, etc.

Extenso surtido de sarcófagos.